Agentes de la Policía Nacional atribuye un delito de resistencia y daños al hombre hindú de 40 años que fue detenido junto a la falla ceramista Ros-José María Mortes Lerma con una botella de líquido inflamable y mechero. El arrestado está la espera de pasar a disposición judicial, según han informado fuentes de la Jefatura Superior de Policía.
La policía investiga qué uso pretendía darle a este líquido inflamable, si era para quemar el monumento fallero, del que se tuvieron que retirar elementos que pudieran herir la "susceptibilidad devocional" de hindús tras una protesta de este colectivo, o para pretenderse fuego él mismo, según las mismas fuentes.
La comisión de esta Falla decidió este martes eliminar de su monumento "todos los elementos" que pudieran "inducir a pensar" que "son signos, símbolos u objetos religiosos que pudieran herir la susceptibilidad devocional de los hindúes", tras una protesta del colectivo, que ha provocado una reunión en el casal de la comisión, en la que han participado Junta Central Fallera (JCF), la propia falla y el presidente del Templo Hindú, Swami Omkarananda.
La reunión se produjo después de las protestas del Templo Hindú-Sivananda Mandir, quien este lunes denunció que en esa falla se iban a quemar "los dioses de la India, en un acto sacrílego sin precedentes, levantando la indignación de 800 millones de hinduistas".
El Templo Hindú y el Centro Cultural de la India denunció que Sri Saraswati, Lord Ganesha y Shiva Nataraja serían "destruidos" en la cremà del monumento y manifestaron su protesta "por esta violación de los derechos sagrados de libertad religiosa que protege la Constitución Española", en nombre "de toda la Comunidad Hindú, el Pueblo de la India y de todos los simpatizantes de nuestra cultura milenaria".
"SOLICITUD DE AMPARO"
El Templo Hindú presentó la protesta a la Alcaldía de Valencia y a la Junta Central Fallera "con carácter de urgencia" y elevó una "solicitud de amparo" a la Delegación del Gobierno "para que intervengan las Fuerzas de Orden Público para evitar esta atrocidad cultural, social y religiosa". "Dado el caso, Dios no lo quiera, las filmaciones de las divinidades incendiadas y profanadas darían la vuelta al mundo en cuestión de horas y nos perjudicarían gravemente a nivel internacional", apuntaba.
El colectivo pidió la mediación de Swami Omkarananda, como "máxima autoridad religiosa" en la ciudad, para negociar una "solución viable y evitar la catástrofe". Ante esta protesta, este martes se ha celebrado una reunión en el casal de la comisión, donde han participado el secretario general de la JCF, José Luis Vaello, miembros de la falla y Swami Omkarananda, donde se ha acordado una manifestación conjunta, la retirada de elementos que pudieran inducir a pensar que eran signos religiosos y el indulto del 'Shiva Nataraja', que se donará al centro hindú.
"NO OFENDER"
Según la manifestación de todas las partes, el objeto de la falla ha sido "homenajear" a las figuras "representativas" de la cultura hindú "y no el de ofender sentimientos culturales o religiosos de la comunidad hinduista".
"Conscientes de la alarma social y polémica suscitada" en este caso, se decidió la convocatoria de la reunión "tripartita" para "resolver en lo posible, a beneficio de todos, la situación creada, ajena a cualquier intención ofensiva en medio de la festividad de la alegría y lo tolerancia".
Por ello, se ha decidido "eliminar de monumento fallero todos los elementos que pudieran inducir a pensar que son signos, símbolos u objetos religiosos que pudieran herir la susceptibilidad devocional de los hindúes".
Asimismo, como prueba de "buena fe, entendimiento y de cooperación", la falla ha acordado "indultar" el 'Shiva Nataraja' y concederlo como donación al Templo Hindú-Sivananda Mandir, en la plaza del Patriarca de Valencia. por último, las partes renuncian a "cualquier otro tipo de reclamación presente o futura en bien de la fiesta y la convivencia entre pueblos".