La comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado licitar la redacción de un proyecto destinado a acometer obras de consolidación en el monasterio de San Jerónimo de Buenavista, construido en el siglo XV, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y que en 2014 celebraba el 600 aniversario de su fundación, toda vez que el monumento ya fue sometido a obras de mejora años atrás.
Según ha informado este jueves en rueda de prensa el concejal de Hábitat Urbano y Cultura, Antonio Muñoz (PSOE), esta contratación cuenta con un presupuesto máximo de 130.000 euros, al objeto de que la empresa adjudicataria diseñe técnicamente el citado proyecto, destinado a la rehabilitación del claustro del monasterio y sus deambulatorios alto y bajo, así como la cubierta del primero de estos espacios del monumento, propiedad del Ayuntamiento.
La actuación, según Muñoz, se encuadra en el paquete medidas abarcadas por los 15 millones de euros cosechados en 2016 por el Ayuntamiento de Sevilla, en el marco de la primera convocatoria de las subvenciones para Estrategias de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi), financiadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).
En ese sentido, Antonio Muñoz ha explicado que las actuaciones subvencionadas asignan un millón de euros para las obras de rehabilitación del monasterio, cuyo claustro, según un informe técnico recogido por Europa Press, sufriría "deformaciones, fisuraciones, agrietamientos, corrosiones y humedades". En ese sentido, ha señalado que las nuevas obras de restauración del enclave, con un presupuesto máximo de un millón, serán licitadas una vez esté redactado el proyecto técnico cuya contratación ahora se aprueba.
El monumento, recordémoslo, ya fue objeto de una actuación de restauración promovida durante la etapa del alcalde socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, un proyecto marcado por las incidencias de la empresa inicialmente contratada para las obras, dado que en 2012 la Gerencia de Urbanismo aprobó rescindir el contrato por "incumplimiento" de la adjudicataria, y en 2013 encargó a una unión temporal de empresas (UTE) la finalización de aquellos trabajos de restauración y adaptación del monumento para su uso como centro cívico.