La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha adjudicado por cerca de 40 millones de euros (39.944.185) la construcción del edificio de Talleres y Cocheras del Tranvía del municipio sevillano de Alcalá de Guadaíra , la última infraestructura pendiente para completar las obras de cara a su puesta en servicio.
La empresa Sacyr Construcción levantará estas instalaciones sobre una superficie de 45.000 metros cuadrados en el Polígono Industrial Cristalería-Carbonería, junto al cruce de la línea del tranvía y la SE-40.
La consejera de Fomento, Rocío Díaz, ha remarcado que este contrato era el último que faltaba por adjudicar para "afrontar todas las obras necesarias para que el tranvía de Alcalá sea por fin una realidad".
Ha valorado: "Ya dijimos que 2024 sería un año clave para el tranvía y así se va a ver de manera clara y nítida".
Ya se están fabricando los seis trenes que compondrán la flota del tranvía y se ha adjudicado la instalación de los servicios de electrificación, sistemas ferroviarios y estaciones, que sumaban más de 82 millones de euros.
La construcción de talleres y cocheras está cofinanciado con fondos europeos Feder y era el último gran contrato de obra pendiente del tranvía.
Las instalaciones se construirán a mitad del recorrido, en una explanada situada en el cruce de la línea con la SE-40. Allí se levantarán siete edificios industriales, uno principal, adaptado para mantenimiento y oficinas, además de otros seis auxiliares (taller de vía y catenaria, túnel de lavado, subestación eléctrica, almacenes de desechos e inflamables, cuarto de bombas y control de acceso).
El complejo de talleres y cocheras cuenta con una playa de vías y dos ramales técnicos de interconexión con la línea tranviaria principal --una por cada sentido-- que suman tres kilómetros.
El edificio principal suma una zona principal para el mantenimiento mayor de los trenes, compuesta por dos vías de levante dotadas con gatos, una vía auxiliar para posicionamiento y trabajos sobre bogies o un torno de foso para el mecanizado y el tratamiento de ruedas.
A su lado hay otra área de mantenimiento menor, también con dos vías sobre foso y equipado para atender las necesidades del material rodante y para abordar los trabajos de inspección que no requieran de equipamiento pesado. En ambos casos tendrán a disposición talleres electromecánicos. También hay una zona administrativa, donde quedará emplazado el puesto de control, zonas comunes para trabajadores (vestuarios, comedor o aseos) y cuartos técnicos y de vías y servidores, así como un área de almacén con muelle de carga y descarga.
Los siete edificios ocuparán una superficie de 7.500 metros cuadrados, mientras que más de 10.000 metros cuadrados se destinarán a plataformas ferroviarias. El resto de superficie hasta llegar a 45.200 metros cuadrados irá a viales, aceras y zona ajardinada. Su construcción tiene un plazo de ejecución de 16 meses una vez se inicien los trabajos.
El Gobierno andaluz ha desarrollado un intenso trabajo para rescatar un proyecto que, cuando llegó a principios de 2019, estaba totalmente abandonado. Se habían invertido más de 120 millones, pero las obras no sólo estaban incompletas y paralizadas, sino también abandonadas y vandalizadas. De hecho, se habían perdido incluso los fondos europeos para poder finalizar las obras y poner en servicio el tranvía.
La Consejería ha logrado revertir la situación, después de conseguir recuperar la confianza y los fondos de la UE que habían perdido los anteriores gestores. Además, se invirtieron 4,3 millones en la reparación de los daños por expolios, robos y vandalismo sufridos durante los años de abandono de la infraestructura antes de sacar a concurso y se han adjudicado todos los contratos pendientes de cara a su esperada puesta en funcionamiento.
