Los líderes del G7 se comprometieron hoy a luchar contra el proteccionismo después de que Estados Unidos superase sus reticencias a incluir esta mención en el comunicado final que sellaron los dirigentes al término de su cumbre de dos días en la ciudad siciliana de Taormina.
"Reiteramos nuestro compromiso de mantener nuestros mercados abiertos y luchar contra el proteccionismo, mientras nos mantenemos firmes contra todas las practicas comerciales injustas", dice el documento de seis páginas.
Los países reconocen asimismo que "el comercio y la inversión libres, justos y mutuamente beneficiosos, al tiempo que crean beneficios recíprocos, son motores esenciales del crecimiento y la creación de empleo", señala el texto.
El primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, que ejerció de anfitrión de la cita, afirmó en una rueda de prensa al término de la cumbre que el debate sobre comercio internacional entre los socios "ha permitido dar significativos pasos adelante".
El mandatario italiano afirmó que la idea que se ha subrayado es que la necesidad de proteger a las clases más "golpeadas" por la globalización no va necesariamente a favor de un "radical cierre proteccionista".
"La discusión es cómo se encuentra el equilibrio entre el interés de proteger a estos sectores más desfavorecidos por la globalización, y cómo se concilia esto con el mantenimiento del comercio libre y la lucha contra el proteccionismo", resumió el primer ministro italiano.
En este sentido, el G7 reconoce en su declaración que el comercio "no siempre ha funcionado en beneficio de todos" y se compromete a "adoptar políticas apropiadas de forma que todas las compañías y ciudadanos puedan aprovechar al máximo las oportunidades ofrecidas por la economía global".
Asimismo, el grupo de las democracias más industrializadas del mundo reconoce la importancia del sistema comercial internacional "basado en reglas" y se compromete a "mejorar el funcionamiento de la Organización Mundial del Comercio" para asegurar que todos sus miembros cumplen las normas.
