Los dos brigadistas, de 27 y 35 años, eran miembros del servicio de extinción de incendios de la Xunta, y fallecieron la noche del jueves en Fornelos de Montes (Pontevedra). Formaban parte de la primera brigada que acudió al lugar, sobre las 22.49 horas. Todavía se desconocen las causas por las que se separaron del grupo. Diez minutos después de la medianoche fueron encontrados muertos por sus compañeros.
Las autoridades gallegas han declarado que todo parece indicar que el fuego, que quemó unas 100 hectáreas, fue intencionado.
El Rey Juan Carlos conversó telefónicamente con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, a quien rogó que transmita sus condolencias a los familiares de los dos fallecidos.
En las últimas 48 horas han sido detenidas cinco personas, cuatro hombres y una mujer, acusadas de provocar un fuego en Peralta (Navarra), y una sexta por los mismos motivos en la serranía baja de Cuenca, donde ardió un área de matorrales que fue apagado en una hora.
La Policía Foral había imputado un delito de incendio forestal a tres de los cinco detenidos de Navarra, tras el siniestro que obligó a evacuar a 500 personas y donde se quemaron cerca de 350 hectáreas de pino, roble, matorral y zonas de cultivo, pero la juez de guardia de Tafalla les ha dejado en libertad provisional.
Todos ellos deberán no obstante entregar su pasaporte y comparecer en el juzgado el 1 y 15 de cada mes, según el auto de la juez, que considera que no es posible, a priori, realizar una calificación del hecho delictivo ni determinar el grado de participación que ha tenido cada uno de los imputados en la comisión del delito.
A los otros dos detenidos, se les ha imputado un delito contra la salud pública.
Estas dos personas, junto con otro de los tres detenidos, están al parecer relacionados con unas plantas de marihuana, descubiertas junto al lugar en el que se originó el incendio. Según las investigaciones, este último se originó por el fuego que realizaron para quemar la piel de unos corderos.
El sexto detenido, de 47 años, ha sido acusado de provocar un incendio forestal en las inmediaciones del kilómetro 4 de la carretera CU- V-468 (Aliaguilla- Provincia Valencia), que afectó a unos matorrales y fue extinguido en menos de una hora. El detenido, fue pillado in fraganti mientras arrojaba un papel ardiendo a la zona de monte.
El Ministerio de Medio Ambiente informó que ayer a las 12:00 horas se encontraba actuando en A Pobra do Caramiñal (A Coruña) con 3 aviones anfibio; en Fornelos de Montes (Pontevedra), con 1 avión anfibio y en Barjas (León), con un helicóptero bombardero.
Precisamente en esta última localidad, el presunto autor del incendio forestal que ya ha arrasado ya más de mil hectáreas, confesó que causó el fuego por una imprudencia cometida cuando paseaba por el campo y se le cayó al suelo un objeto con fuego procedente de la pipa que fumaba.
Así lo manifestó a EFE el subdelegado del Gobierno en León, Francisco Álvarez, después de que la Guardia Civil detuviera en Ponferrada al supuesto autor del incendio, M.L.S., vecino de Mosteirós, un pueblo perteneciente al municipio de Barjas, de 52 años y sin antecedentes penales. El arrestado ha sido puesto a disposición judicial como presunto responsable del origen del fuego.
