“¡Yo he sido un malagueño en Madrid! Todo el mar Mediterráneo, la luz, las playas, las mujeres, todo eso lo he pintado en Madrid, porque siempre he pintado de memoria…” Son palabras de Manuel Mingorance, cuyas obras regresan ahora a las salas del Archivo Municipal que a partir de ahora llevarán el nombre del artista malagueño. Dice su albacea y amigo, Diego Maldonado, que dejó de pintar figuras femeninas con modelos al natural por petición expresa de su mujer Lucía, pero lo cierto es que lo mismo retrataba cada curvatura de cabeza a la perfección que era capaz de plasmar un luminoso día de mar en calma en las playas de El Palo desde el revuelto litoral de la Costa Brava.
Es uno de los muchos artistas que iniciaron su formación en Málaga y marcharon en busca de oportunidades a Madrid, llevando siempre su ciudad en el alma y la retina artística. Málaga cumple parte de su deuda con él con este recorrido por su trayectoria vital, con óleos, dibujos sobre papel y lienzos de un Mingorance alejado de corrientes vanguardistas, de lo que se hacía en su época y que huía de los ismos.
Nacido en el señero barrio malagueño de la Trinidad, en la calle Churruca, el artista hizo carrera, obtuvo fama y reconocimiento en la capital de España, pero nunca dejó atrás su Málaga natal, como evidencia esta selección de obras donadas a la ciudad, algunas nunca expuestas al público antes. La muestra puede visitarse hasta el próximo 31 de mayo, de lunes a viernes de 10:00 a 13:00 y de 17:00 a 20:00 horas y los sábados, domingos y festivos de 10:00 a 13:00 horas.
