La alcaldesa, María José García-Pelayo, ha expresado su temor ante la posibilidad de que el Estado esté desarrollando una estrategia encaminada a que el aeropuerto de Jerez “muera por inanición”, advirtiendo de que la provincia de Cádiz necesita que llegue “oxígeno” en forma de inversiones que permitan que sigan siendo “atractiva” para los inversores.
El hecho de que el aeropuerto no se haya sumado en 2023 a la tendencia positiva del resto de aeródromos españoles empieza a generar cierta inquietud, expresada ya estos últimos días por el Clúster Turístico, pero ahora también por la regidora jerezana.
“Tenemos un problema importante con la poca prioridad que se está dando al aeropuerto en materia de inversiones… A ver si nos están haciendo un sándwich para que muera por inanición”, ha dicho García-Pelayo, que igualmente se ha referido a las múltiples carencias que siguen existiendo en materia de infraestructuras, un extremo al que igualmente se ha referido estos últimos días el presidente del Clúster, Antonio Mariscal.
La alcaldesa de Jerez entiende que ya es hora de que “se salde la deuda histórica” que el Estado mantiene con la provincia de Cádiz, donde “no se recuerda una máquina haciendo nuevas carreteras”, avanzando incluso que “al final se va a producir una rebelión colectiva”, porque “no puede ser que se paguen más impuestos que nunca y se reciba menos que nunca”.
Entre esas demandas se encuentran el tercer carril de la autopista AP-4, pero también el desdoblamiento de la N-IV. Ambas actuaciones no van a pasar por ahora de la provincia de Sevilla, algo que “no es justo” para García-Pelayo, que exige que la provincia de Cádiz “no se quede al margen del desarrollo de esas carreteras”.
“La trampa del Gobierno socialista ha sido venir a decir que como ya se ha liberado el peaje de la autopista, ya ha cumplido con la provincia”, ha incidido la alcaldesa de Jerez, que entiende que esa liberalización ha traído como consecuencias “problemas de mantenimiento” en dicha carretera, que para colmo de males ahora “está saturada” de tráfico y en algunos casos “incluso colapsada”.
Esas carencias –sumada a la ausencia de la alta velocidad ferroviaria- están “cerrando la puerta a la inversión” e incluso puede provocar la deslocalización “de toda la industria auxiliar industrial y aeronáutica”, subrayando García-Pelayo la dificultad que existe poner en marcha un Polo Aeronáutico con ese déficit de infraestructuras.
La alcaldesa ha vuelto a sentirse agraviada con otras comunidades autónomas. “No puede ser todo para Cataluña y que Jerez y la provincia de Cádiz sigan esperando. Para nuestra capitalidad cultural no hay ni un euro y para Barcelona hay 30 millones, y lo mismo ocurre con el circuito… Ya no estamos hablando solo de una discriminación por falta de carreteras, sino de que estamos padeciendo una situación de abandono porque existen otras prioridades. No es justo”, insistió la alcaldesa.
El presidente de la Federación Provincial de Empresarios de la Construcción de Cádiz (FAEC), Emilio Corbacho, ha dicho “amén” a este discurso de García-Pelayo, reconociendo que la supresión del peaje de la autopista “no ha traído los frutos esperados” porque ya hay empresas del sector del transporte “que se han vuelto a la carretera Nacional” para evitar ese colapso.
“Eso es producto de la mala gestión de la alternativa a la autopista, que se debió desdoblar desde el kilómetro cero hasta el último, porque desdoblar por partes no es desdoblar”, añadió.
Por si fuera poco, la autopista “está realmente impresentable” y eso incide “no solo en el sector de la construcción, sino también en la seguridad”.
“Es curioso que a un Gobierno que se le llena la boca hablando de la igualdad de género, que nosotros por supuesto defendemos, no defienda igualmente la unidad territorial, que también es importante, y estamos viendo día a día cómo se ofrece un tratamiento distinto a unas y otras comunidades autónomas. Eso es un torpedo de flotación a lo que debe ser la igualdad”, concluyó.