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Jerez

La Gallinita Ciega

Nosotros, la juventud, los jóvenes de Jerez, tenemos la posibilidad de que nuestro brillo vuelva a impregnar la ciudad

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  • Jóvenes de NNGG Jerez en la zona del Guadalete -

Gran parte de la población jerezana se concentraba este pasado seis de mayo en el parque Gónzalez Hontoria, esperando a que llegaran las diez de la noche y con ello el tradicional alumbrado de las más de un millón de luces que integran la Feria y que dan sentido a una semana llena de alegría, fiesta y diversión. Una imagen preciosa de nuestra ciudad que junto a nuestra música predice lo que será una gran semana.

Recorriendo aquella tarde de sábado el recinto ferial, percibo que los jóvenes somos a la ciudad como las miles de bombillas lo son a la Feria. Es necesaria la luz para que surja la vida, para que la verdad salga a flote y lo que permanecía oculto se revele sin preocuparse. La luz es raíz, lo que permanece bajo la arena y permite que crezcan las flores, que se alimenten las plantas y los árboles crezcan, en definitiva, lo que da lugar a que la belleza aparezca.

Los jóvenes somos esa luz, la de nuestra sociedad, pero también la de la oscuridad, en la incertidumbre que supone lo que es conocer de verdad lo que es vivir. Pero como todas las bombillas que componen el brillo de nuestra feria, ninguna es para siempre e inmune al paso del tiempo y, por lo tanto, tienen que ser renovadas. Tenemos que ser capaces de captar esa luz que nos ayudará a apreciar qué es lo que nos hace destacar, pero también a contrastar y vislumbrar con mayor nitidez, la oscuridad, el miedo, el sufrimiento y el abandono que ahora y con mayor frecuencia sabemos que va palideciendo nuestra ciudad.

Nuestro Gobierno municipal ha ignorado esa luz. Se ha vuelto de un color amarillo y desagradable que parpadea cada vez más hasta que se extingue. Las casas de los jerezanos se han quedado a oscuras, no por falta de fuerza para afrontar estos problemas sino porque a los que nos gobiernan les ha dado igual o no han querido cambiar las bombillas de nuestra tierra.

Mamen Sánchez se ha olvidado de nosotros, la agenda de la Delegación de Juventud es un libro en blanco  en donde ninguna medida ha ido a atender el gran problema de paro que tiene nuestra generación, las dificultades para poder acceder a una vivienda o para poder emprender o emanciparnos. Quien quiera acceder a algún tipo de información lo que va a encontrar es una página web obsoleta y vacía que con un toque de cinismo enuncia que no hay ni programas ni talleres, que estos están en proyecto porque al parecer dos legislaturas no les han sido suficientes. No les importó que el Año Europeo de la Juventud no se celebrara en nuestra ciudad, una oportunidad para realizar actividades en colaboración con el tejido asociativo juvenil jerezano y que estos propusiesen sus iniciativas. Ahora tienen prisa, y en menos de una semana han anunciado lo que para ellos son sus medidas estrella en materia de juventud. Creen que necesitamos un carné joven que lleva creado desde hace más de treinta años y que nos conformaremos con que nos prometan como algo extraordinario lo que sería lo común en una Delegación de Juventud. ¿Acaso no sería lo normal que el Ayuntamiento ya trabajara en informarnos sobre los asuntos que más nos preocupan? ¿Qué ya hubiesen escuchado a las asociaciones y colectivos juveniles? ¿Qué ya hubiéramos sido beneficiarios de políticas adecuadas a nuestras necesidades reales?

El Gobierno Municipal está perdiendo el tiempo jugando a la gallinita ciega.Si el tradicional juego que consiste en que uno de los jugadores, con los ojos vendados debe de atrapara algunos de los participantes y adivinar quién es, en nuestra ciudad se realiza a la inversa. Mamen tiene puesta una venda en los ojos que se ha colocado ella misma para no vernos a pesar de que somos nosotros, los jóvenes, los que reclamamos la atención de la gallinita, la llamamos a fin de que se decida por fin a atraparnos y, sin embargo, la gallinita quiere seguir siendo ciega.

Lo que no saben y que es síntoma de su más remota ignorancia es que no hay límite que ponerle a la luz, no hay barrera ni muro que pueda frenarla. Esta, junto con la verdad, siempre asoman, en cualquier rincón del mundo. Será de las pocas cosas que no nos puedan coartar y hacer desaparecer, aun con tanto empeño detrás. Nosotros, la juventud, los jóvenes de Jerez, tenemos la posibilidad de que nuestro brillo vuelva a impregnar la ciudad, que las bombillas y las farolas vuelvan a iluminar nuestra tierra, que lo bonito lo sea aún más y que seamos tenidos en cuenta. El cambio se produce en las urnas y nosotros tenemos la obligación de hacerlo posible.

Es tiempo de evitar que sigan riéndose de nosotros, que entre ellos sigan robándole el esplendor a nuestro municipio. Es hora de que cuando empiece el juego, la gallinita ciega, por fin sin vendas, avance a paso rápido hacia nosotros para darnos nuestro lugar.

 

* Silvia Rodríguez Robles es Secretaría General de Nuevas Generaciones Jerez.

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