Ajenos a la visita del evaluador de la Unesco, algunos turistas fotografiaban ayer la fachada de la Catedral de Jaén. Tal vez la próxima vez que visiten el templo sea ya Patrimonio Mundial. Tras la jornada del lunes en Úbeda y Baeza, el arquitecto jefe de Monumentos Históricos del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS Francia), Pierre-Yves Caillault, encargado de evaluar el expediente de ampliación de Úbeda y Baeza a la Catedral de Jaén, cumplió la agenda programada. Al técnico francés le acompañaba el vicesecretario de la Junta Directiva del Comité Nacional de ICOMOS España, Víctor Fernández Salinas, profesor titular de Geografía Humana en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Sevilla.
Según explicó Víctor Fernández a VIVA JAÉN, el papel del evaluador es “contrastar in situ” el expediente elaborado para defender la ampliación de la candidatura”, obra de la arquitecta urbanista, Rufina Fernández.
“Además del informe que elabore Pierre-Yves Caillault, se realizan otros estudios, conocidos como informes de despacho”, explica Víctor Fernández. Una vez concluida la visita y con el resto de informes, el evaluador hará una propuesta, que será la que se eleve a la 38º reunión del Comité del Patrimonio Mundial, que se celebrará en el mes de julio de 2014 en Qatar y que está formado por 21 países que van rotando.
El vicesecretario de ICOMOS España explica que la propuesta del evaluador puede ser para que se admita como Patrimonio Mundial o desaconsejándola, si bien, es el comité el que tiene la última palabra. “De hecho, en algunas ocasiones, el comité ha aceptado propuestas desaconsejadas por ICOMOS o al contrario”, añade Víctor Fernández.
En cuanto a la circunstancia de que se trate de una ampliación, explica que no es la primera vez que se hace y que suelen ser habituales. En este sentido recuerda los casos de Granada y Córdoba, en Andalucía, que comenzaron como declaraciones de La Alhambra y de La Mezquita y que posteriormente se ampliaron al Albaicín o a la Judería, por ejemplo.
En cuanto al entorno, que será visitado hoy por el evaluador, Víctor Fernández informa de que es fundamental que exista un plan gestor, a la vez que asegura que lo más habitual es que no esté implementado, como sucede en el caso de Jaén. No obstante, indica que se han producido declaraciones sin que el plan estuviera concluido.
Sí destaca que es importante conocer la opinión de asociaciones y algunos colectivos de la ciudad para ver el grado de aceptación de la sociedad. Por ello, ayer tarde se mantuvo una reunión con la federación de asociaciones vecinales Objetivos Comunes (OCO), la asociación de Amigos de la Catedral y la asociación cultural Círculo Ánimas.
Por último, el vicesecretario del Comité Nacional de ICOMOS España, Víctor Fernández Salinas, recuerda que, por supuesto, es muy importante el estado en el que se encuentre el bien, que en el caso de la Catedral de Jaén y tal como recoge el expediente elaborado “su integridad material es consecuencia de una adecuada conservación sin que se hayan alterado las características originales”.
La motivación
“Para entender una manifestación cultural como el fenómeno Úbeda-Baeza y completar su ‘Valor Universal Excepcional’, es preciso incluir la Catedral de Jaén: un edificio aislado y situado en otra ciudad distinta al binomio Úbeda-Baeza, sí; pero un monumento único en su género en el que se sintetizan todas las soluciones e innovaciones constructivas de su autor, el arquitecto que hizo posible el enclave renacentista de Úbeda-Baeza, Andrés de Vandelvira”.
Este es uno de los principales argumentos que recoge el expediente elaborado por la arquitecta urbanista Rufina Fernández y que desde su llegada el domingo a Úbeda, Pierre-Yves Caillault, está comprobando ‘in situ’ en una agenda que hoy le llevará a conocer todo el entorno de la Catedral de Jaén.
La decisión final dependerá de muchas circunstancias, pero todos los expertos coinciden en que la inclusión de la Catedral de Jaén en el expediente de Úbeda y Baeza no solo lo completa, sino que lo refuerza. Además, contribuye a cumplir una de las tendencias en las que se mueve en los últimos años el Comité del Patrimonio Mundial, según otras fuentes de ICOMOS España consultadas por este periódico, y que no es otra que contribuir a la creación de itinerarios turísticos y al desarrollo de las zonas que aspiran a la declaración.
Pero por encima de todo está la singularidad de la Catedral de la Asunción de Jaén y su fidelidad a la idea original de su arquitecto Andrés de Vandelvira. El expediente que tiene en sus manos el evaluador Pierre-Yves Caillault, es claro al respecto: “Por su carácter unitario y aislado, la Catedral no ha tenido reconstrucciones en ninguno de sus elementos y espacios arquitectónicos, ni ha sufrido ningún tipo de siniestro natural o social que lo ponga en riesgo desde la fecha en que inició su construcción. Asimismo, los documentos históricos y bibliográficos custodiados en el Ayuntamiento de Jaén, tampoco nos refieren ningún tipo de reparación mayor, sólo obras de conservación o de restauración, siendo las más importantes en los últimos tiempos, la reparación de las cubiertas”.
Mañana el evaluador pondrá rumbo a su París natal con la imagen en la retina de un templo que aún, después de cinco siglos desde su construcción, sigue siendo la seña de identidad de un pueblo, el de Jaén, una ciudad pequeña al sur de España, sitiada por un bosque de olivos, cuyos vecinos se levantan cada día con la gravedad que impone la actual situación económica y que saben que la declaración como Patrimonio Mundial no les revela la grandeza de su Catedral, pero sí supone una oportunidad de desarrollo. Otra más.