El alcalde de Granada y coordinador provincial de Cs, Luis Salvador, ha indicado este martes que sigue manteniendo contactos con todas las fuerzas políticas del Ayuntamiento para buscar la "máxima estabilidad en el gobierno" de la ciudad para los dos próximos años, mientras el que fue su socio de gobierno hasta hace 21 días, el PP, le ha vuelto a pedir que "dé un paso al lado" para reeditar su acuerdo.
En declaraciones a los periodistas, el alcalde, que gobierna desde entonces con un solo concejal más, ha reconocido que su actuación es "decisiva" para la resolución de esta crisis, que ha recalcado que no ha "creado" él, y toda vez que el PP "ha dejado claro por activa y por pasiva que no va a regresar al equipo de gobierno".
En este contexto, y cuando "todos los grupos están hablando entre sí", Luis Salvador ha indicado que tomará sus decisiones buscando la "mayor tranquilidad para los granadinos", y ha explicado de que es consciente de que tiene que "buscar una solución en primera persona" y que "el paso definitivo en su momento" lo tiene que "dar".
En una comparecencia de prensa previa, el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Granada, César Díaz, ha vuelto a insistirle en que dé "un paso al lado" facilitando así el relevo en la alcaldía, que, a su juicio, ha de asumir su fuerza política, al ser la que tiene más corporativos en el ámbito del "centro derecha".
La solución, según César Díaz, no puede pasar por que al frente de la ciudad se sitúe una persona "triplemente imputada", en alusión al portavoz socialista en el Ayuntamiento, Francisco Cuenca, procesado por un juzgado de Sevilla por la inspección de unos cursos de formación de la Junta cuando él era uno de sus delegados en la provincia granadina.
Díaz también ha señalado que el PP hablará "con todos" incluidos, PSOE, que es la fuerza mayoritaria en el Pleno, Cs y ediles no adscritos, en un momento en que hace falta "diplomacia" y "altura de miras" para dar una "solución estable" y que permita "la gobernabilidad de la ciudad.