El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, ha acusado hoy a la oposición de utilizar la bandera como un arma y el nombre de España "en vano". En ese contexto, ha rechazado lo que ha calificado de "veneno del odio" y ha proclamado "alto y claro" que viva el 8 de marzo, en respuesta a la reiterada acusación de la oposición de que la decisión del Gobierno de celebrar las manifestaciones del día de la mujer del 8 de mayo contribuyeron a la expansión del virus en España.
Esta proclamación de Sánchez se produce también después del informe que la Guardia Civil ha entregado en un juzgado de Madrid, que investiga la responsabilidad que pudo tener el Delegado del Gobierno, José Manuel Franco, en la autorización de la citada manifestación. Un informe que ha provocado una crisis entre el Ministerio del Interior y la Guardia Civil, con el cese por parte Fernando Grande Marlaska del jefe de la Comandancia de Madrid, el coronel Diego Pérez de los Cobos.
Tras el citado informe, que concluye que esa manifestación no debió ser autorizada, el presidente del Gobierno ha advertido que el país que se necesita es el de la igualdad real y efectiva entre los hombres y las mujeres y por ello ha proclamado "alto y claro: viva el 8 de marzo".
PROMETE NO USAR SU TURNO DE RÉPLICA PARA DESLEGITIMAR AL ADVERSARIO
Esta proclamación de Sánchez le ha dado pie también, durante su intervención en el Pleno del Congreso para pedir el apoyo a la sexta y última prórroga del estado de alarma, a "rogar" a los diputados que, aunque muestren sus discrepancias con el Gobierno, lo hagan sin descalificaciones ni insultos, sin presunciones de culpabilidad, sin acusaciones gruesas de mala fé y también sin acusaciones de "conspiraciones inverosímiles".
Incluso se ha comprometido a no utilizar su turno de réplica para responder a las provocaciones, a no subrayar las diferencias, a no deslegitimar a sus adversarios, sino a concederles el mismo respeto que pide para su gobierno. Ha reclamado "concordia" y un pacto entre diferentes.
Sin embargo, durante su intervención previa sí ha cargado contra los que a su entender usan la bandera como si fuera "un arma" o como si fuera una "frontera que separa". Ha reclamado además que no se use "el nombre de España en vano", ni ninguno de los símbolos para intentar separar.
VIRUS SIGNIFICA VENENO: EL VENENO DEL ODIO ES EL MÁS DAÑINO
Pedro Sánchez ha apuntado que la palabra "virus" en latín significa "veneno" y ha apuntado que ese veneno se está viendo en algunos lugares como en EEUU, pero no quiere que "cuaje" en España. "El veneno es el odio, es el más dañino porque corroe las sociedades y aniquila las comunidades", ha exclamado.
Por ello, ha pedido decir "no al veneno del odio, no a la violencia física, no a la violencia verbal, no al insulto y no a la provocación" y ha reclamado "concordia" en la reconstrucción del país y una "nueva actitud política".
En referencia a lo que está ocurriendo en Estados Unidos --donde se están produciendo revueltas en todo el país a raíz de la muerte por asfixia de un ciudadano negro durante una detención policial--, ha señalado que no quiere eso para España, ni para sus hijos porque: "nuestros padres no se sacrificaron para esto".
Pedro Sánchez ha argumentado que la pandemia ha dejado al descubierto muchos errores del sistema y ha reclamado a los grupos que demuestren a los ciudadanos la utilidad de la política y lo imprescindible que es el servicio público: "Demostremos que servimos para algo más que para llenar titulares de crispación, de provocación y de insultos. Nuestra labor no es fácil, siempre se puede hacer mejor, pues hagámoslo mejor".
Según ha dicho, ha llegado a la política para trabajar por la convivencia y para impulsar un crecimiento sostenible e inclusivo para no dejar y nadie atrás. Cree que es necesario construirlo con urgencia, y ha reiterado que "hay millones de personas que esperan concordia", que los políticos sean "útiles de verdad" y que resuelvan los problemas graves que se han acumulado con la crisis sanitaria.