A lo largo de dos horas, siete aspirantes republicanos se esforzaron por cautivar a las bases de su partido en el debate organizado por la cadena de televisión CNN en Nueva Hampshire.
La política exterior brilló por su ausencia -apenas se mencionaron el Yemen, Afganistán o Libia- en un debate en el que todos los protagonistas insistieron en la necesidad de promover la seguridad en las fronteras como fórmula para resolver los problemas.