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El Puerto

Poco espacio para el juego en el centro

Hay suficientes plazas, pero no en cambio juegos infantiles donde los más pequeños puedan disfrutar

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  • Plaza de España, sin juegos -

El ocio y el disfrute de niños pequeños y jóvenes y adolescentes en el centro de la ciudad es una cuestión limitada, porque no hay suficientes espacios para realizar actividades, diversión, ejercicios, etc. A pesar de que la ciudadanía exige y pide al equipo de Gobierno formado por PSOE e IU más plazas, plazoletas, espacios con juegos infantiles, las posibles opciones y las alternativas a los pocos lugares destinados a los más jóvenes del casco histórico de la ciudad, se encuentran paralizadas y sometidas a estudio debido a que aún no se ha aprobado ni se ha avanzado lo suficiente en el plan especial para el centro.


La ampliación de este tipo de espacios de ocio y juego es una “vieja reivindicación”, según explica una residente del centro, “porque yo llevo quince años viviendo en la zona y siempre he escuchado que se iban a hacer nuevas plazas o que nuestros niños tendrían sitios para jugar, y si no es en una plaza a la que se lleven la pelota, poco pueden hacer”, sobre todo “los que vivimos lejos del parque Calderón”, que es el único parque que cuenta con juegos infantiles en el centro. Otra opción para los padres es acudir al parque de Puerto Nuevo.


En cambio, otros padres, como bien admiten a este medio, prefieren coger el coche e irse a otros puntos de la localidad, como el parque del Juncal, La Arboleda Perdida, La Puntilla o La Paz en Valdelagrana, que es “donde los niños se encuentran más a gusto a la hora de jugar”. Además, “ya tienen grupos de amigos, de las veces que vamos, porque están en edad de jugar, de relacionarse, de disfrutar en un parque, cosa que cerca de casa no pueden hacer”, eplica otro padre.


Con respecto a espacios del centro que supongan un lugar cómodo para los niños y jóvenes, la primera opción de los portuenses es la plaza de España, que en días soleados o de buenas temperaturas se llena de niños jugando con patinetes, bicicletas o pelotas, e incluso es lugar de reunión de los jóvenes o estudiantes. “Es un punto de encuentro que nos cae bien a todos los que vivimos por el centro. Es lo más cercano que tenemos, y un lugar donde no nos tenemos que preocupar de molestar o ser molestados”, admite Antonio S. Pero sí es cierto “que es un lugar que compartimos, porque hay muchos niños, y mucha gente sentada en los bares que hay aquí, y entonces convivimos, pero no es un espacio para nosotros, los jóvenes”.


Evidentemente, los padres apuntan que “estaría mucho mejor si tuviera algunos juegos para los más pequeños, que llega un momento en que se aburren”. O en cambio “tenemos que bajar de casa con un montón de juguetes”.


Otros lugares, tampoco habilitados y hasta “peligrosos” para los más pequeños, pero que son utilizados por los padres con “mucho cuidado para que no haya ningún accidente” ya que están muy cerca del lugar por el que pasan los vehículos, son plazas como la construida recientemente en el tiempo en la calle San Juan, la plaza Juan Gavala, Ave María, Polvorista o Isaac Peral. “No decimos que no tengamos plazas, si tenemos por suerte unas cuantas, pero ninguna habilitada para nuestros niños”.


Otros padres recuerdan que se habló de un proyecto de una nueva plaza en la trasera de la Basílica Menor de Nuestra Señora de los Milagros que “debería contar con juegos infantiles”, porque es “lo que nos falta para nuestros niños”. De otra manera “casi que nos sobra una nueva plaza, porque ya tenemos suficientes, lo que necesitamos es que estén acondicionadas para no tener que desplazarnos, coger el coche o llevar a nuestros hijos a la otra punta de la ciudad”.


En general, la petición ciudadana es clara y se dirige a más juegos infantiles en las distintas plazas existentes. Además, solicitan actividades más a menudos, no solo en el centro, sino en otros puntos de la ciudad, para que se beneficien otros niños, donde haya ludotecas, actividades, colchonetas hinchables, talleres, pintacaras, globoflexia, etc, para hacer posible que los más pequeños puedan divertirse y disfrutar de su tiempo de ocio.

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