Paulo Nasser, abogado del fondo brasileño DIS, acusación particular en el 'caso Neymar' que se juzgará a partir del próximo lunes en la Audiencia de Barcelona, ha explicado que el fichaje del brasileño por el Barcelona “realmente costó 82 millones de euros y tan solo 17 aparecieron como transferencia oficial”.
Nasser ha ofrecido este jueves una rueda de prensa en Barcelona en la que ha dado detalles sobre los argumentos de la acusación antes del inicio del juicio oral que tendrá lugar en la Sección Sexta de la Audiencia de Barcelona.
“Nuestra demanda tiene dos bases. La primera de ellas es un delito de corrupción privada. Y, la segunda, un delito de estafa en la modalidad de simulación contractual. La causa real de los contratos que Neymar firmó con el FC Barcelona era ahorrarse lo que debían pagar a DIS y al Santos, una cláusula de rescisión de 65 millones de euros”, ha explicado el abogado.
DIS se aseguró en 2009 el 40% de un futuro traspaso del jugador, que entonces todavía no había debutado como profesional en el Santos, a cambio de 2 millones de euros.
Pero los abogados del fondo brasileño consideran que ese pacto se incumplió.
“Neymar, con la connivencia de sus padres, de los dirigentes del FC Barcelona y de los dirigentes del Santos,traicionó la confianza que le dieron los hermanos Sonda (propietarios de DIS)”, ha sentenciado Nasser.
El FC Barcelona acabó desembolsando 25,17 millones al Santos por los derechos del jugador y otros 60 millones por diversos conceptos a N &N Consultoria Esportiva, la empresa familiar dirigida por el padre de Neymar, pero DIS solo percibió 6,8 millones, por su 40%.
Con todo, el abogado de DIS considera que “el Santos acabó recibiendo su parte del 55%”.
“Esto se hizo acordando de manera confidencial un partido amistoso con el Barcelona por un precio de 4,5 millones de euros y pagando 7,9 millones por un derecho de preferencia por tres jugadores que nunca se ha ejercido”, ha añadido.
Por ello, DIS y FAAP (Asociaciones de Atletas Profesionales de Brasil), que comparecerán como acusaciones particulares, piden 5 años de prisión por Neymar, una multa en beneficio del Estado de 149 millones de euros y "una inhabilitación para su profesión de jugador" mientras dure la condena a Neymar.
Además, piden una pena de cinco años de cárcel a Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu (presidente y vicepresidente del club azulgrana en ese momento), además de siete años y medio de inhabilitación para ejercer cargos directivos y 195 millones de indemnización económica en beneficio del Estado.
Por su parte, el Ministerio Fiscal solicita 5 años de prisión y 10 millones de euros de multa para Sandro Rosell por los delitos de corrupción en los negocios y estafa en el fichaje de Neymar, para el que también pide 2 años de cárcel y otros 10 millones de multa por un delito de corrupción en los negocios.
En cambio, exonera al también expresidente de la entidad azulgrana, Josep Maria Bartomeu, al entender que pese a firmar los contratos presuntamente fraudulentos para fichar al delantero del Santos, entre 2011 y 2013, no formó parte activa de las negociaciones.
También serán juzgadas por su participación en el caso tres personas jurídicas: el FC Barcelona, el Santos FC y N &N Consultoría Esportiva, para los que la fiscalía solicita penas de multas de 8,4, 7 y 1,44 millones de euros, respectivamente.
El traspaso de Neymar lleva un recorrido judicial desde hace años, con varios frentes abiertos que le han ocasionado numerosos problemas jurídicos y financieros al FC Barcelona.
El caso que aborda la Audiencia de Barcelona es el denominado 'Neymar 2', ya que el 'Neymar 1' culminó en un acuerdo con el tribunal de Barcelona por el que el Barça pagó 5,5 millones de euros y fue condenado por dos delitos fiscales, eximiendo a Rosell y Bartomeu de responsabilidades.