La propietaria del material, Pesquerías Chiclana, denunció en la Casa Cuartel de la Benemérita este robo, después de comprobar que las anclas no se encontraban en el lugar en el que se hallaban. Hay que recordar que dichas anclas eran parte del material que iba a utilizarse en la implantación de una almadraba en aguas de Sancti Petri, un proyecto que finalmente no se ejecutó.
De momento, desde la Guardia Civil no se descarta ninguna hipótesis sobre los motivos del robo y el destino de las anclas. Se estudia la posible venta del material a distintas chatarrerías de fuera de la provincia, incluso de Marruecos; aunque desde Pesquerías Chiclana creen que el destino que haya podido tener las 90 toneladas de hierro sea la fundición para su posterior venta.