A las puertas de los juzgados de San José, en la calle Los Balbo, se concentraron en la mañana de este pasado martes una treintena de miembros de la Asociación SOS Bebés Robados de Cádiz, así como amigos y familiares de Jesús Alcina Blanco, para cuyo caso iba a declarar como imputada una ginecóloga supuestamente implicada en el mismo. Ante una gran expectación mediática y social, la ginecóloga que en 1983 trabajaba en el antiguo Hospital Zamacola (actual Puerta del Mar), entró en la sala acompañada por su abogado, pero se negó en todo momento a contestar a las preguntas del abogado de la asociación, acogiéndose a su derecho constitucional. Esta negativa a declarar no ha sentado nada bien ni al denunciante, ni a la familia de éste, ni tampoco a los miembros de este colectivo, pues todos esperaban que “contase lo que supiera, que hablara con el corazón para aportar algo más de luz para las 400 familias que en Cádiz sospechan que sus hijos fueron robados”.
Alberto Prián, abogado de la asociación, comentó que la imputada se negó a contestar a las preguntas de la jueza instructora del caso, al igual que a las preguntas que iban a realizar desde la acusación particular, por eso “sólo hemos podido dejar constancia de las preguntas que íbamos a realizarle que iban encaminadas a esclarecer el caso de Jesús Alcina y que grado de participación en cuanto a la cesárea y en cuanto a la intervención médica, pero se ha negado a declarar y no hemos podido sacar ningún tipo de información al respecto”.
Ha respondido sólo a cuestiones generales relacionadas con su persona y con su trabajo, “de hecho su abogado no ha realizado ninguna pregunta”. Prián recordó que “todos los imputados tienen derecho a no declarar, lo único es que si llegamos a sede judicial, ahí sí tendría la obligación de responder. Pero mientras esté en instrucción no podemos hacer nada al respecto”, aunque “sí seguiremos pidiendo el resto de diligencias y pruebas que hemos solicitado”, para añadir que “lo siento mucho por la familia que tenía muchas esperanzas en esta declaración para obtener más información, algo que yo también deseaba porque podría haber arrojado algo de luz, no estamos pidiendo que nos diga quién era, pero sí que nos diera algunas pistas y dejar a algunas familias tranquilas, pero no ha podido ser”.
El siguiente procedimiento “está la solicitud de una serie de pruebas, entre ellas la exhumación del cadáver, la prueba de ADN, y es que hay que tener en cuenta que este es un caso particular puesto que el niño tenía deformidades y por lo tanto, cuando se realice la exhumación será fácil identificarlo, y sería un mero trámite la prueba de ADN, pero si no se encuentra un niño con esas características pues tendremos que utilizar otro tipo de pruebas para esclarecer este caso ya que sería una prueba contundente de que el niño no se encuentra donde debería”.
“Hay más testigos que hemos propuestos para declarar, pero en calidad de qué declaren está en manos de la jueza, pero sí hemos propuesto más personas, desde matronas a mandatarios y otro tipo de profesionales”, indicó Prián.
Charo Herrera, presidenta de la Asociación SOS Bebés Robados de Cádiz, estuvo presente en la concentración. Para ella, una vez que supo que la ginecóloga imputada se había negado a declarar, indicó que siente “por un lado decepción y por otro sentimos que si no ha declarado es porque algo tiene que ocultar”. Para ella es sospechoso que “llegase a los juzgados muy contenta, diciendo que iba a declarar, y luego se haya ido por la puerta de atrás y sin declarar. Por eso pensamos que algo raro hay, pensamos que se abre una nueva puerta porque la jueza ha podido ver que la imputada esté ocultando algo y con lo cual tire para adelante con este caso y con el resto de casos en los que esta doctora también aparece. Es importante que los jueces dejen de archivar nuestros casos, han archivado el 80 por ciento de los casos en Cádiz, y lo que es más importante, espero que se siga adelante con las exhumaciones que hemos solicitado”.
En cuanto a Jesús Alcina Blanco, que es miembro de la junta directiva de la Asociación SOS Bebés Robados Cádiz y cuyo caso es el que se trató este martes, señaló que “me choca que cuando la imputada ha llegado a los juzgados le dijo a los periodistas que iba a declarar, e incluso le preguntó a su abogado si podía hacer declaraciones ante los medios de comunicación. Luego en la sala, se ha cerrado en banda y se ha negado a declarar. Ha cambiado de blanco a negro y no entiendo por qué”.
Alcina indicó sin embargo que “estoy contento. Y lo estoy porque mi denuncia no se basa sólo en que yo escuché, a mí me dijeron que, sino que pongo sobre la mesa varios documentos, alguno de ellos firmado por esta doctora, que se contradicen entre ellos. Pienso que la forma de esclarecer esta situación es hablando y explicándola, y si se niega a ello pues poca cosa hay que deducir”.
“Yo le preguntaría a la gente que lo está viendo desde afuera si este hecho levanta o no más sospechas sobre el caso”, explicó Alcina quien espera que la jueza “es que cumpla con su obligación y reparta justicia porque ya va siendo hora, y creo que hay muchos casos que están muy claros, casos que se pueden esclarecer más, pero para eso hemos solicitado las exhumaciones que se pueden ejecutar por orden judicial. Creo que aquí en Cádiz tenemos la esperanza de contar con buenos profesionales, con grandes virtudes y con buen corazón y con muchas ganas de luchar para sacar a la luz la verdad”.