El tiempo en: Barbate

Sevilla

Benito Moreno, autor del "Ra-ra-ra", muere en la Casa de los Artistas

El polifacético artista, hermano de Josele y de Máximo Moreno, fallece a los 78 años de edad un día después de ingresar en la residencia de ancianos

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • El artista Benito Moreno, a finales de los 90. -

Benito Moreno, artista polifacético como pocos, ha muerto. Nació en el sevillano barrio de la calle Feria en 1940 y ha fallecido este martes con 78 años prácticamente en el mismo lugar, en la residencia de ancianos de San Juan de la Palma, donde había ingresado sólo un día antes.

Músico y pintor en una familia de músicos y pintores, Benito Moreno, hermano de Josele, que cantó en Los Payos, y de Máximo, el gran documentalista de varias generaciones de artistas y autor de algunas de las portadas míticas de la época en la que se vendían discos (suyas son las de los tres primeros discos de Triana, el primero de Miguel Ríos, alguno de Alameda y tantos otros), grabó catorce discos, aunque muchos lo recordarán como el autor del "Ra-ra-ra", ese alegato antifútbol convertido (¡oh, paradojas de la vida!) en la sintonía de un popular programa deportivo de la radio en España.

Su padre era pintor, y él se inició muy joven en la pintura y en la interpretación, estudiando Arte Dramático y Dibujo. Vivió en Francia, donde fue catedrático en una escuela de arte en la Bretaña durante años y a su regreso a España, a principios de los años 70, entró en contacto con músicos como Carlos Cano, Lole y Manuel o Hilario Camacho, e inició su carrera musical.

Su primer disco Romances del Lute y otras canciones, incluía el tema "España huele a pueblo". La censura vetó el disco en las radios. Él lo cantó en directo y consiguió cierto éxito. Tras este disco vendrían Ellos y ella, Mis sombras completas y La vida. Luego puso música a las rimas de Gustavo Adolfo Bécquer, cantó A Sevilla por sevillanas, y grabó Me han quitado lo bailado.

Moreno hizo en sus discos, cargados de cotidianeidad, su propio manifiesto vital. Criticó los fichajes millonarios del mundo del fútbol ("El lobito está cobrando, los borreguitos pagando…") y declaró su amor por una ciudad que seguramente nunca le dio el reconocimiento merecido. Vivía en la Plaza del Museo y paraba habitualmente en los cafés de la zona, donde todo el mundo lo saludaba por su nombre. Tras cuatro años conviviendo con un cáncer de pulmón, el lunes ingresó en la residencia de ancianos que se inauguró hace un año en la Casa de los Artistas, al inicio de la calle Feria, donde falleció sólo unas horas después.

Como pintor, se especializó en retratos y empezó a recibir encargos de España, Francia, Gran Bretaña y Bélgica. Ha expuesto en París, Madrid, Sevilla y en varias ciudades de Inglaterra, donde permanece una parte importante de su obra. Otra parte importante de ella se encuentra en los libros, pues también fue un gran ilustrador. Por ejemplo, de las obras de Gloria Fuertes.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN