23 millones de euros deben la Junta de Andalucía a los ayuntamientos malagueños. Es el dinero que le corresponde pagar a la administración autonómica por los planes de empleo que ha puesto en marcha pero que han financiado las administraciones locales, según ha denunciado Izquierda Unida que, como ya hiciera en el Parlamento andaluz, amenaza con encerrarse en la Diputación provincial para reclamar estos pagos.
El compromiso de la Junta era pagar la mitad de los fondos destinados a desarrollar los planes de empleo joven y el dirigido a emplear a los mayores de 30 años. Lo cierto es que debe a los ayuntamientos lo que prometió, ha denunciado Izquierda Unida.
Al conjunto de los ayuntamientos andaluces, la Junta le adeuda unos 100 millones por los planes de empleo desarrollados el pasado año. A los malagueños, casi 23. 15,3, del Plan Emplea Joven. Y 7,5, del Plan 30+.
El alcalde del Ayuntamiento de Teba, uno de los afectados por estos débitos, considera que es no una mera cuestión económica; sino de concepción política.
La preocupación de Izquierda Unida no queda aquí, sino en el “cambio de reglas de juego” que ha planteado el Gobierno autonómica.
Denuncia el coordinador regional del la formación que, para recibir estos pagos, la Junta ha acortado los plazos de justificación del dinero invertido por los ayuntamientos y ha marcado el 31 de julio como fecha límite. Muy poco tiempo, en su opinión.
Castro pide que se aplique un plazo más amplio para justificar la subvención y además, que la Junta abone la parte que le corresponde a los ayuntamientos que ya han justificado su inversión en estos planes.
