Las fuerzas kurdas han logrado cercar a los combatientes del grupo terrorista Estado Islámico (EI) que lograron penetrar ayer en el enclave kurdo sirio de Kobani, fronterizo con Turquía, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG señaló que los combates todavía continúan entre los guerrilleros del EI que quedan en la ciudad y las Unidades de Protección del Pueblo, milicias kurdo sirias, que los tienen rodeados.
En un comunicado en su página web, las fuerzas kurdas explicaron que han cercado desde cuatro lados a los yihadistas que se infiltraron en los barrios de Kani Korda y Butan, y en las zonas de la mezquita del Hach Rashid y el hospital de Médicos sin Fronteras.
El EI emprendió ayer un nuevo ataque contra Kobani, donde sus milicianos consiguieron entrar disfrazados de miembros de las Unidades de Protección del Pueblo y de rebeldes sirios.
Desde el jueves, al menos 22 extremistas, y 35 civiles y combatientes kurdos han perdido la vida en los combates.
Kobani se ha convertido en un símbolo de la resistencia kurda frente al EI tras soportar durante más de cuatro meses entre septiembre y enero pasado el asedio de los radicales, que al final fueron expulsados de allí.
El inicio del asalto ayer a Kobani coincidió con una ofensiva del EI contra los barrios bajo el control del régimen sirio en la urbe de Al Hasaka, en el noreste del país.
El Observatorio destacó que los enfrentamientos todavía prosiguen en distritos del sur y el suroeste de la localidad.
Un activista del grupo Un paso en contra, Ali Ahmad, que emplea un nombre falso por temor a los yihadistas, aseguró ayer a Efe que el EI se había hecho con una cuarta parte de Al Hasaka, que estaba en manos del régimen.
Hasta ahora, el 60 % de esta localidad estaba bajo el dominio de las fuerzas kurdas, mientras que el 40 % se encontraba en poder de las autoridades sirias.
El EI proclamó hace casi un año un califato en Siria e Irak, donde ha conquistado amplias partes.
