“Nuestro futuro es inseparable de lo que ocurra el próximo domingo”, indica Castro en un artículo publicado ayer en la prensa oficial cubana, en el que hace referencia a la consulta sobre la enmienda constitucional para la reelección ilimitada en Venezuela.
El líder cubano señala que en ese referéndum “no existe otra opción que la victoria” y afirma que “el destino de los pueblos de nuestra América dependerá mucho de esa victoria y será un hecho que influirá en el resto del planeta”.
La expresión “Nuestra América” forma parte de la denominación del ALBA (Alternativa Bolivariana para los pueblos de Nuestra América) iniciativa de integración impulsada por Chávez y a la que, además de Cuba y Venezuela, pertenecen Bolivia, Nicaragua, Dominica y Honduras.
Castro recuerda el incidente ocurrido en una cumbre en Monterrey (norte de México) en 2002, en donde el entonces presidente mexicano, Vicente Fox, –al que llama “vil traidor a la historia de su abnegado y combativo pueblo”– le pidió que abandonara la reunión para evitar problemas con el gobernante estadounidense George W. Bush.
Señala que antes de partir, Chávez le visitó “con urgencia e indignado” y le preguntó cuánto petróleo necesitaba Cuba para vencer el bloqueo que Estados Unidos mantiene contra la isla.