El portavoz de Vox, Antonio Fernández, entiende que para garantizar la seguridad en la avenida de Méjico “hace falta voluntad política”, advirtiendo de que “ocho meses después” de la llegada de María José García-Pelayo “todo sigue igual” en una zona que padece “continuos altercados” motivados por la presencia de diversos “locales de ocio nocturno”.
Fernández se ha reunido con los vecinos de la zona, constatando “que las peleas, ruido a altas horas de la madrugada y el abandono siguen siendo la tónica habitual en esta avenida”.
En ese encuentro, los vecinos han vuelto a trasladarle que “muchas noches no pueden dormir debido al ruido de la música y las disputas entre los mismos clientes de los locales”, dado que “la presencia policial es insuficiente y las cámaras que se instalaron al principio de la avenida solo se dedican a multar a los conductores”.
Vox recuerda que la avenida de Méjico “es una zona familiar en la que, además, se pagan impuestos elevados”. Sin embargo, los vecinos “no perciben que ese dinero se invierta en su barrio”, ya que no se corrige una situación que “no es nueva”, dándose el caso además de que “en los últimos meses se han abierto nuevos locales de este tipo”.
Por si fuera poco, “los aparcacoches siguen actuando, acosando a residentes y comerciantes durante el día”, mientras que “la accesibilidad en los pasos de cebra es nula y el deterioro de la vía pública sigue siendo el mismo que hace un año”.
“En definitiva, parece que nada ha cambiado en esta zona de Jerez, a pesar de las promesas políticas que se hicieron en campaña. Los vecinos de avenida de Méjico y alrededores lo único que demandan es salud y calidad de vida, nada más”, concluye Antonio Fernández.
