Siguiendo la estela de tantas ciudades españolas, Arcos sucumbió a la fiesta de los animales. San Antón se antojó una reunión de mascotas de todo tipo, predominando como cabía de esperar los perros y gatos. Además, caballos, tortugas, algún pájaro... se dieron cita en el Paseo de Andalucía, para llevar a cabo el recorrido que tomaría por Paseo de Boliches, la Corredera, Debajo del Corral... hasta acabar en el recinto ferial.
Los propietarios de las mascotas tuvieron ocasión de desfilas cual pase de modas luciendo sus animales y de disfrutar de una estupenda barra. Muchos de los ejemplares recibieron la tradicional bendición de la Iglesia, encarnada en esta ocasión en el párroco de Santa María, el padre Jesús Lozano.
La cita fue convocada el domingo por la Delegación de Participación Ciudadana junto a la protectora de animales ASOSA. De hecho, los delegados del área y de Medio Ambiente, Saray Soria y Diego Carrera, acudieron con sus perros. La mala noticia es que finalmente no se produjo ningún apadrinamiento de los animales que ahora mismo custodia la protectora y que de momento no han encontrado una familia de acogida o nuevo propietario; animales en muchos casos abandonados y, en otros, incluso maltratados.
