El Bufete Ortiz prepara una demanda, que si puede será colectiva, contra bancos como Santander, Caixabank y Popular “por la venta entre 2007 a 2015 de bonos y pagarés Abengoa a clientes minoristas sin haberles realizados los correspondientes test de idoneidad y conveniencia, como fija la regulación de la CNMV”.
Este despacho, que acumula numerosos juicios ganados a entidades financieras por comercialización fraudulenta de productos financieros, explicó ayer en una nota que los clientes que adquirieron estos bonos y pagarés desconocían que se comercializaban en Irlanda; desconocían que podían perder su dinero dependiendo de la situación de la empresa; y que se los colocaron justo cuando los bancos comenzaban a retirar la financiación Abengoa. Esta última situación se produjo especialmente en 2015.
Se estima que hay unos 10.000 clientes minoristas a los que se le vendieron estos productos que en conjunto suman una inversión de 50 millones de euros.
Esta demanda se sumará a las múltiples acciones judiciales iniciadas contra Abengoa en España y EEUU desde que empezó a impagar a proveedores en el verano de 2015 y luego presentó preconcurso en noviembre pasado. Su antigua cúpula está imputada en una de esas querellas.
