El Gobierno local descarta aplicar una tasa turística a las personas que se alojen en la ciudad con motivo de las fiestas navideñas, como ha pedido IU, aunque admite que el debate está “encima de la mesa”, como reconoció anoche la delegada de Comercio, Nela García, en el transcurso del espacio El Templete en 7 TV Jerez.
García apuntó que se van a analizar “pros y contras de modelos de financiación y posibilidades de financiación” para sostener el coste de los servicios públicos durante las zambombas, pero “de momento no optamos por aplicar una tasa al turista”. Eso no quita que, con el tiempo, rectifiquen, pero anteponen que la repercusión económica “es incalculable y no podemos permitirnos perderla”, en relación con el rechazo que podría acarrear esta medida. “Puede haber otras posibilidades”, zanjó.
Por su parte, Raúl Ruiz Berdejo, portavoz de IU, destacaba ayer el “esfuerzo por incrementar la limpieza, y ni así nos da, y eso es porque no estamos preparados para recibir a cien mil visitantes y hay que redoblar la apuesta. Eso tiene un coste”. De ahí que insistiera en aplicar una tasa de 2 euros a quien se aloje en Jerez en estas fechas. “El que viene a gastarse 600 euros, pagar dos euros por noche no le supone nada, y se encontrará las calles más limpias y con mejor oferta desde lo público”.
Antonio Fernández, de Vox, no respalda la propuesta de IU, “porque penalizamos al que viene a crear oportunidad económica. Es una tasa que discrimina. Sólo se grava al que pernocta, pero al que está en casa de un amigo o viene en autocaravana no”.
En lo que sí coinciden desde Vox e IU es en garantizar el modelo tras detectar determinadas señales en contra el pasado puente que no sólo tienen que ver con la limpieza, sino con el propio ambiente de macrobotellón en torno a la zambomba. Fernández considera que “hay que garantizar una convivencia sana entre los que vienen de fuera y los que vivimos aquí. Se ha dado por bueno el modelo del ocio y hay que estar preparados para no desechar esta oportunidad, pero esto se puede replicar en cualquier otro lugar y llegará el momento en que dejen de venir personas, por eso hay que cuidarlo”. Ruiz Berdejo señala al respecto que las zambombas son “una experiencia para quienes nos visitan, pero se perciben que esto se ha convertido en un macrobotellón, dejarán de visitarnos y lo harán otros”.
Por eso mismo, Nela García invitó a tomar “medidas valientes”, como la redacción de una ordenanza, “porque no queremos que el modelo pierda su particularidad”.
En lo que sí coinciden todos es en el acierto del adelanto de la fecha de inicio de las zambombas y de encendido del alumbrado. La delegada de Comercio destacó al respecto que la actividad comercial se ha incrementado. Es el modelo acertado, como ya se ve en otros países, y nos lo traslada todo el mundo”.
Desde el PSOE, José Antonio Díaz reconoce que le “choca” una zambomba “en el mes de los difuntos”, pero le parece “adecuado que se adelante el encendido del alumbrado, como si se enciende el día 1 de noviembre”.
El portavoz de Vox se escuda en “los agentes económicos, que lo ven un acierto, ya que en el resto de Europa es una tendencia. Y la gente pedía zambombas con antelación. Esto es puro negocio y se prima al negocio a la tradición”. El más crítico es Ruiz Berdejo, que señala que se “trata de estirar el chicle”, aún así lo “entiende” desde el punto de vista de los ingresos generados y por el fomento de la actividad comercial.