En esta guía, que ha sido elaborada por los arquitectos José Gabriel Padilla, Rafael Casuso y Amalia Ortega, se incluyen desde intervenciones en el conjunto histórico, el archiconocido caso de Las Protegidas o la Estación de Autobuses o el estado del edificio del Banco de España, obra de Rafael Moneo. "Es una compañera de viaje magnífica para persona que tenga interés en descubrir la ciudad desde un punto de vista ameno", resaltó Carazo.
En la obra se recogen 193 conjuntos arquitectónicos considerados como los más representativos de la calidad arquitectónica jienense y pretende ser un "apoyo sencillo y manejable" al visitante. Está dividida en cinco áreas: el Castillo de Santa Catalina y el Casco Antiguo; la Catedral y su entorno; el Paseo de la Estación y el ensanche Berges; el Bulevar y la periferia; y los alrededores. Todos ellos proponen al lector un recorrido que comienza en el castillo para adentrarse en la zona monumental a través de los Baños Árabes y la plaza de la Magdalena, terminando en zonas de más reciente intervención urbanística, como el Bulevar e incluso edificaciones en el extrarradio como el Castillo de Otíñar o el Balneario de Jabalcuz.
El recorrido de la guía se plantea como un paseo "continuo y práctico" que permite entender cada zona y sus características urbanas.
Mayor difusión
El arquitecto y ex decano del Colegio de Arquitectos, Pablo Carazo, lamentó ayer que existe un "desconocimiento" de la calidad arquitectónica de la ciudad puesto que "no se ha hecho hincapié en la difusión". De ahí, que resaltara la importancia de esta guía, que servirá "para aumentar el conocimiento" de los rincones y conjuntos arquitectónicos más importantes de Jaén.
Por otra parte, el arquitecto insistió en que si Jaén no se compara con nadie "tenemos la calidad arquitectónica de cualquier otra ciudad" con algunas "singularidades propias de la forma de construir y de la topografía, ya que se encuentra en la ladera de una montaña". No obstante, cree que el problema viene cuando se compara con otras capitales como Granada, Córdoba o Sevilla con lo que se crea "cierta frustración injustificada".
