La LXXII promoción de Suboficiales de la Armada recibe los reales despachos

Un total de 176 suboficiales recibieron en la Escuela de Suboficiales de la Armada (Esubo) de San Fernando los reales despachos, lo que supone obtener el primer empleo como militar de carrera. 151 de estos suboficiales pertenecen al Cuerpo General de la Armada y los otros 25 al Cuerpo de Infantería de Marina.

Todos los recibieron en el transcurso de la ceremonia militar que tuvo lugar en el patio de armas de la escuela y que en esta edición ha sufrido cambios en la secuencia, potenciándose el homenaje a los Caídos que ha pasado a desarrollarse en los prolegómenos, antes de la entrega de destinos propiamente dicha.
Un cambio que le ha dado más solemnidad a la ceremonia al conseguir que tanto invitados como público asistente se involucraran desde el principio en los acontecimientos.

En esta promoción de la Armada, según los datos facilitados por la Esubo, han cursado estudios 30 mujeres (el 17 por ciento), que acceden al Cuerpo General en las especialidades de Administración (8), Maniobra y navegación (4), Artillería y misiles (3), Alojamiento y restauración (3), Comunicaciones (3), Sonar (2) y Electrónica (1), además de otras tres en el Cuerpo de Infantería de Marina.

La edad de los nuevos sargentos oscila entre 24 y 34 años. En la promoción predominan los alumnos andaluces (34,1por ciento), seguidos de los gallegos (33 por ciento) y los murcianos (9,7 por ciento), siendo el 23,2 por ciento del resto del territorio nacional y el 4,5 por ciento de países como Alemania, Suiza, Uruguay, Argentina, Venezuela o Ecuador. La provincia que mayor número de alumnos aporta es La Coruña con un total de 45, seguida de Cádiz con 44. Con una aportación más reducida están Murcia, con 17 alumnos, y Pontevedra con ocho.

El Príncipe de Asturias ha sido este año quien ha presidido la ceremonia, aunque según el orden que se ha mantenido durante años, era el Rey el encargado de entregar los despachos al haber sido Don Felipe quien los entregó en 2009 y turnarse ambos en este cometido. Y en este ocasión ha llegado acompañado por la ministra de Defensa, Carme Chacón, quien por primera vez visitaba San Fernando, aunque no la provincia toda vez que ha estado en varias ocasiones en la Base Naval de Rota.

También estuvo presente el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez; el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán; el presidente de la Diputación de Cádiz, Francisco González Cabañas -quien entregó el sable que otorga la Institución Provincial a los dos alumnos destacados- y el alcalde de San Fernando, Manuel María de Bernardo, entre otras autoridades civiles y militares.

Despacho y condecoración
Don Felipe fue el encargado de entregar los Reales Despachos a los dos sargentos “números unos” de la LXXII Promoción de la Escuela de Suboficiales, María Teresa Piñeiro Alvarez, de Cartagena, perteneciente al Cuerpo General de la Armada y Zorobabel Soto Vargas, de Jerez de la Frontera. También recibieron la Cruz al Mérito Naval con distintivo blanco como recompensa a su brillante expediente académico. Ambos declararon al final a los medios de comunicación que es el fruto de mucho esfuerzo y el caso del sargento jerezano, gracias también a la familia que lo apoya.

A partir de ahí fueron el resto de las autoridades presentes las encargadas de entregar los despachos a los 174 sargentos restantes, entre ellos dos damas alumnas en estado de gestación, a quien se los entregó la ministra de Defensa, Carme Chacón. Ambas vistieron el uniforme especial para esos casos.

Tras las entrega de despachos, los nuevos sargentos desfilaron de a tres bajo la bandera en un acto de confirmación del juramento y el capellán leyó la oración de acción de gracias. El acto estaba prácticamente terminado.

Discurso del director
Fue el comandante-director de la Escuela de Suboficiales de la Armada quien se encargó de dirigir las últimas palabras a los nuevos sargentos, pidiéndoles que sean “generosos con vuestros mandos y poner siempre a su disposición vuestros conocimientos con humildad, entrega y lealtad”.

“Lealtad que entraña el cumplimiento de lo que el honor y la honradez exigen cumplir, siendo fiel a las convicciones, a las creencias, a la verdad y a la palab a dada y al reconocimiento debido a nuestros superiores”, dijo el director de la Esubo.

En otro momento de su intervención, el comandante director se refirió a la “palabra dada en el juramento que hicísteis ante la Bandera. y que os obliga llegado el caso hasta a dar vuestra vida por España. Tal acto solo es posible con una sólida formación del espíritu, que creemos haberos dado, y con un gran amor a España, que os hemos inculcado”.

“No dudéis, por tanto, en enseñar y exigir aquellos valores que, si bien con ares en calma son importantes, cuando se convierten en temporales, se hace imprescindibles. No olvidéis el hábito del estudio que tanto se os ha inculcado en esta Escuela. La Armada para seguir en primera línea, requiere de vuestra continua formación. Todo ello sin duda, os otorgará el prestigio y reconocimiento de ser los buenos suboficiales que la Armada necesita”, dijo el comandante director.