Los cinco acusados recibieron ayer el respaldo de los partidos nacionalistas vascos y de ERC, que consideran el proceso un ataque a la libertad de expresión y al euskera, mientras que las dos asociaciones acusadoras han insistido en que “demostrarán” que Egunkaria era empleada por ETA para financiarse.
Los procesados se enfrentan a penas de entre 12 y 14 años de prisión en el juicio que empezó ayer.