David Rodas tiene 36 años y tras diez años trabajando en la privada este otoño se quedó en el paro después de su despido masivo en la empresa. Ha sido su único curro. Ahora se ha apuntado a una academia para presentarse a unas oposiciones. Tiene el título universitario tras sacarse una carrera en Sevilla y ahora busca la seguridad de una plaza fija en la administración pública.
Víctor Chaves ya ha dejado atrás los cuarenta. Estudio en la Escuela Politécnica de Algeciras, de donde salió con su título de perito. Con el boom de la construcción le fue bien. No faltaba el trabajo y los buenos sueldos, pero llegó la crisis y ha tenido que hecho de todo para sacarse un sueldo. También ha optado por apuntarse a una academia y probar suerte con las oposiciones. “Ponerse de nuevo a estudiar es duro, pero lo veo como una inversión. Sé que el primer año será difícil, pero si para dentro de dos apruebo tengo ya mi futuro asegurado. Cobraré menos pero al final de mes hay una nómina fija. Veo difícil volver a lo mío”, asegura.
David y Víctor son gaditanos. Uno de Jerez y otro de Algeciras y son ejemplos de un fenómeno que está llevando a las academias a vivir una época dorada, porque son mayoría los que se matriculan en busca de un puesto de trabajo fijo en la Administración Pública.
Es un fenómeno que se vive en toda España. Son abundantes los titulares de la prensa nacional y de provincia en los que se habla de él. “Avalancha de opositores en las academias de la región para afrontar las pruebas”, tituló el diario asturiano La Nueva España. “Avalancha de opositores por el anuncio de miles de puestos en la Junta”, lo hizo el ABC. “Avalancha de opositores para cubrir 91 plazas a cartero tras siete años de espera”, anunció La Opinión de Tenerife.
Ángel Pinto dirige desde hace más de dos décadas la academia ‘Clases de Ángel’ en Cádiz y prepara a opositores para administrativo y auxiliar y ha visto como en los últimos años han aumentado sus matriculados. Asegura que se ha producido un aumento de la edad media de sus alumnos tras la crisis económica. Tiene alumnos que van desde los 18 a 60 años. Explica que con la recesión económica fueron muchas las personas mayores que se quedaron en el paro y sin opciones apenas de reincorporarse a la vida laboral en la privada, por lo que ven en lo Público la única vía de volver a tener un trabajo estable. Así el perfil del nuevo opositor es una persona de entre treinta y cuarenta años que buscan ante todo estabilidad.
El boom inmobiliario hizo que en la construcción se ganase mucho dinero y se hacía sin tener una gran preparación académica. Ahora no es así y ya no se busca tanto una nómina abultada, sino la seguridad que es un sueldo fijo y una empresa, como en el caso de la Pública, que no cierra nunca. Y es que la crisis ha hecho que la ciudadanía sea más conservadora en el aspecto laboral.
“La gente está buscando refugio en el sector público”, asegura José María López, profesor en la academia Oposiciones Juani, en Jerez de la Frontera, donde la demanda de matrículas ha aumentado como en el resto de los centros de la provincia. Un curso en una academia dura prácticamente lo mismo que un curso escolar y la mayoría de los que se apuntan persisten en los estudios y los terminan, incluso vuelven a apuntarse al siguiente si no han logrado plaza en la primera convocatoria. López advierte que la tenacidad en el estudio es primordial, que los alumnos deben de ser conscientes de que no es una tarea fácil y que deberán dedicarle mucho tiempo.
Porque son muchos los que aspiran a quedarse con una plaza y éstas son limitadas. “La competencia es dura, pero es premio es bueno”, asegura Cristóbal Vera. Él es profesor en la academia Adecu, de Algeciras, donde preparan desde hace varias décadas a aspirantes a los Cuerpos Uniformados: Policía Nacional, Local y Guardia Civil. Explica que una media de veinte horas de estudios a la semana no vale y que el alumno que quiere obtener la plaza debe echarle más tiempo a la preparación. La perseverancia es clave para triunfar en unas oposiciones.
Como en los otros casos, la edad media del opositor ha cambiado en los últimos años y en la pasada década la mayoría de los aspirantes eran de entre 19 y 22 años, ahora los hay que pasan de la treintena. También ha cambiado el perfil. Si antes los universitarios que se apuntaban eran minoría, ahora son más los que llegan con un título.
En Andalucía, el Consejo de Gobierno ha aprobado la primera de las ofertas extraordinarias de empleo público previstas en el proceso de estabilización de 37.115 plazas que en la actualidad están ocupadas por personal temporal, tanto de la Administración de la Junta como de sus entidades instrumentales.
De ellas 1.515 corresponden a la Administración General, 18.618 están destinadas al personal estatutario; 12.603 en relación con el sector docente; 388 para la Administración de Justicia y 3.300 plazas para el sector instrumental.