En medio de cierta polémica por el malestar de la plantilla al entender que un homenaje así tras la derrota era inmerecido, el reconocimiento popular e institucional al equipo bilbaíno está siendo desbordante.
Ya desde el inicio del recorrido preparado, un guiño a la canción que comienza diciendo que “Por el Río Nervión bajaba una ...”, la gente se agolpaba a ambos lados de la vía por la que transitaban los jugadores, al principio subidos al autobús oficial del equipo y no el camión descapotable que estaba previsto.
Como los cristales tintados no permitían que los aficionados pudiesen verlos, los jugadores bajaron al asfalto y se dirigieron a pie al Ayuntamiento. Ya en el consistorio, con miles de personas flanqueando la margen derecha de la Ría en ese punto, el presidente del Athletic, Fernando García Macua, ha pedido “perdón” al alcalde de la ciudad “por no haber podido saldar la deuda” que el club rojiblanco tiene “con la villa y sus ciudadanos” de ofrecerle un título.