Los que a partir de este jueves serán los nuevos portavoces del PSOE, Ana María Carrillo, y de IU, Francisco Ángel Sánchez, en la Diputación de Córdoba, tras el Pleno de constitución de la nueva Corporación provincial que tiene lugar este jueves, han suscrito previamente el "acuerdo programático" que habían cerrado sus respectivas formaciones, para gobernar en coalición la institución provincial en el mandato 2015/19 que se abre en esta jornada.
Dicho acuerdo, según explicó ya el coordinador de Política Municipal del PSOE de Córdoba, Francisco Zurera, permitirá dotar a la Diputación de Córdoba de "un gobierno estable, cercano, eficaz y transparente", que se dedique a atender "a los pueblos" de la provincia y cuya acción política "tenga como referencia a las personas, especialmente a las que peor lo están pasando", corrigiendo así el rumbo "equivocado y erróneo" que, en su opinión, le ha dado el PP a la institución provincial los últimos cuatro años.
Zurera también detalló que los representantes de ambas formaciones alcanzaron "acuerdo programático" para "gobernar la Diputación", en "beneficio de los cordobeses", ya que "la provincia necesita un impulso hacia adelante", que llegará ahora de la mano del PSOE, en un gobierno de coalición con IU.
Ello ocurrirá, según subrayó Zurera, tras "cuatro años de gobierno del PP" caracterizados por el "abandono de nuestros pueblos", los cuales ahora "serán los protagonistas" de las "medidas realizables" que pondrá en marcha el nuevo gobierno provincial, siendo "el desarrollo económico, el empleo y los servicios sociales los pilares de su acción política", y teniendo claro que "la prioridad será el empleo", lo que implicará la puesta en marcha de "un Plan Provincial de Empleo, con dotación presupuestaria anual, que gestionarán los ayuntamientos directamente".
Zurera señaló que, además, el acuerdo con IU, que es "bueno para Córdoba y para la estabilidad del gobierno" en la institución provincial, también conlleva que los consistorios de la provincia podrán contar con "la asistencia y cooperación técnica, económica y jurídica" de la Diputación.
El protagonismo de la provincia, de sus municipios y alcaldes también se evidenciará en la recuperación del Consejo de Alcaldes, órgano que "tendrá una participación activa en la elaboración de los presupuestos" de la Diputación y para los programas que ponga en marcha la institución provincial, que en este nuevo mandato hará realidad también "un Plan Estratégico para el Desarrollo de la Provincia".
El acuerdo con IU, según indicó el responsable socialista, conlleva igualmente la "apuesta por los servicios públicos" y la aplicación de la Ley de la Dependencia, junto a "un impulso a la transversalidad de las políticas de igualdad en todas las áreas de la Diputación", que comienza así "un nuevo camino, en el que las personas serán las protagonistas" y a través del cual "nuestros pueblos tendrán la mejora que precisan", algo para lo que en el PSOE tienen "la ilusión y la fuerza para hacerlo".
Por su parte, el secretario de Organización de IU en Córdoba, Sebastián Pérez, ya destacó que en su formación están "satisfechos" con el "acuerdo programático" y "de gobierno" que cerraron con el PSOE para la Diputación de Córdoba, donde constituirán un "cogobierno" entre los 12 diputados provinciales socialistas y los tres de IU, para "transformar la realidad" y poner la institución provincial "al servicio de la gente".
Pérez explicó que el acuerdo "está basado en las necesidades de las personas" y de los municipios de la provincia y cuyas claves pasan por "garantizar los servicios públicos, el fortalecimiento de las empresas públicas de la Diputación y el incremento de las inversiones públicas en la provincia", a la vez que se trabajará en "la defensa de las competencias de los ayuntamientos", ante la "reforma de la Ley de Administración Local del PP, que ha buscado quitar competencias a los ayuntamientos para dárselas a grandes empresas y corporaciones" privadas.
Ello se hará para "poner la Diputación al servicio de los intereses de la ciudadanía", para que sea "una administración que solucione los problemas de los ayuntamientos, que sea rápida, eficaz y transparente", eliminando la "imagen negativa" de la institución provincial de que es "partidista", poniéndola "al servicio real de los intereses de las personas, en un contexto de empobrecimiento y de desempleo" en la provincia.