Uno de los espacios con más solera de la hostelería nocturna de la capital hispalense cumple su primera década al servicio de su clientela. Se trata de La Caja Negra, un templo donde el culto al rock sevillano es el pan nuestro de cada día.
Pero no sólo es la música lo que, durante todos estos años, ha inundado este espacio, ya que han sido habituales otras actividades culturales, como grabaciones de documentales o videoclips, exposiciones de pintura o fotografía, presentaciones de discos, libros, fanzines y revistas, fiestas de fin de rodaje de películas, obras de teatro y espectáculos de cabaret.
Para celebrar este magno acontecimiento, los responsables de La Caja Negra han decidido organizar el próximo miércoles, 17 de diciembre, una fiesta muy especial, en la que Pepe Bao dirigirá una espectacular Jam Session. Están invitados todos los músicos y artistas de otras disciplinas que de alguna forma han colaborado con su arte, a realzar el prestigio de este local sevillano, que ya forma parte de la historia de la ciudad.
Desde su apertura y durante estos diez años, han pisado este escenario los músicos sevillanos más representativos, como los históricos y muy conocidos Raimundo Amador, Andrés Herrera Pájaro, Manuel Imán, Pepe Bao, Diego Fuentes, Dogo, Pive Amador, Charlie Cepeda, Pepe Begines, Andreas Lutz, El Pechuga y un largo etcétera. Pero no sólo han sido artistas locales los que han dado brillo a este emblemático espacio.
Músicos de la talla del internacionalmente reconocido pianista Gonzalo Rubalcaba; Santiago Auserón, fundador de Radio Futura, uno de los grupos nacionales más importantes de la historia; Sammy Taylor, hijo del gran rockero sevillano Silvio Fernández Melgarejo; el vasco Mikel Azpiroz y su formidable banda Elkano Browning Cream o Tonino Carotone son algunos ejemplos de la gran cantidad de personajes ilustres que han pasado por esta sala.
En el ámbito flamenco también han sido acogidos en La Caja Negra artistas como Manuel Molina, Lole Montoya, Alba Molina, las bailaoras Marta Balparda o Asun Demartos, y los galardonados con el premio Filón, del prestigioso Festival Las Minas de La Unión, Gautama del Campo y Abdon Alcaraz.
La Caja Negra, en los últimos años, ha servido de plataforma de lanzamiento para incontables bandas sevillanas y andaluzas que empezaban su carrera y que gracias a sus actuaciones en este espacio han conseguido que sus trabajos sean más conocidos por el gran público.
En estos tiempos tan complicados, las diferentes personas y productoras que han tenido la responsabilidad de diseñar las programaciones, tanto de flamenco, como de rock, jazz, blues, soul y otros estilos musicales, han conseguido metas inalcanzables hasta hace poco tiempo, ya que en el escenario de La Caja Negra, en la actualidad, se puede disfrutar de espectáculos flamencos y conciertos prácticamente todos los días de la semana.
Una forma de apoyar la cultura en general, y la sevillana en particular, que los gestores de la mítica sala no han dudado en llevar a cabo, muchas veces en circunstancias complicadas, ya que es muy difícil, sin ayudas públicas, programar tal cantidad de eventos y de una media de calidad que supera a la de la mayoría de los locales de Sevilla.