Donde dije digo, digo Diego. Eso es lo que ha hecho Bankia con Cándido Chavero, al que ha vuelto a tomar el pelo y, lo que es peor, ha jugado con sus ilusiones y su futuro.
El 26 de septiembre, Viva Huelva publicaba que por fin la entidad bancaria rescatada por el Gobierno llegaba a un acuerdo verbal con Cándido -ha perdido su casa por avalar a su hijo, que también ha perdido la suya , ambas en Aljaraque- que evitaba el desahucio de ambos al consensuar un alquiler social, y abría la puerta la condonación de la deuda.
Catorce días después, y tras una nueva reunión con Bankia en su sucursal de la Plaza de Las Monjas, el compromiso verbal adquirido con Cándido se ha evaporado y las condiciones han cambiado, una vez más, según ha denunciado a Viva Huelva la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Huelva, que ha acompañado en todo momento a Cándido y su familia en su lucha.
Según ha explicado Tomás González, portavoz de la plataforma, Bankia se muestra tajante en cuanto a la vivienda del hijo. Si en un principio se mostró abierta a la posibilidad de un alquiler social, ahora se cierra en banda hasta el punto de que no retirará la orden de lanzamiento (desahucio) prevista para el 21 de noviembre.
En cuanto a la vivienda de Cándido, el acuerdo alcanzado pasaba por un alquiler social de 350 euros al mes, revisable tras analizar los informes de los Servicios Sociales de Aljaraque. Pues ahora Bankia dice que establecerá un alquiler “de acuerdo a la media de alquileres de la zona donde está la vivienda”, explica González.
Por último, Bankia “se niega en rotundo a la condonación de la deuda -40.000 euros-, a pesar de que ya se había solicitado”.
Este nuevo cambio de postura de la entidad bancaria ha supuesto un fuerte varapalo para Cándido y su familia, que habían empezado a ver la luz al final del túnel, y ahora todo parece un espejismo. “Está bastante mal, se siente engañado con el único objetivo de obtener un beneficio económico”, explica González.
Ahora, ¿qué?
A pesar de que el futuro se ha tornado más negro, la PAH ya ha anunciado que no se va a quedar de brazos cruzados. De hecho, cuando se alcanzó el acuerdo en septiembre, ya advirtieron que “no nos fiamos de este compromiso hasta que esté por escrito, ya que no es la primera vez que nos engañan, y por eso seguiremos insistiendo hasta que Cándido se quede”.
En esta línea, van a preparar nuevas movilizaciones en Aljaraque, donde vive esta familia, y ante Bankia, para que “sus clientes sepan que al colaborar con esta entidad son moralmente tan culpables como ella”. E n cuanto al desahucio, ya advierten que “nos movilizaremos para pararlo”.
