Agentes del Subsector de Tráfico, pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, han imputado a dos vecinos de la localidad de Gibraleón como presuntos autores de los delitos de simulación de infracción penal y estafa, tras fingir haber sido víctimas de un accidente de circulación.
Según ha informado el Instituto Armado en una nota, el pasado día 29 de julio la Guardia Civil recibió aviso acerca de un accidente de tráfico que se había producido en un camino vecinal del término municipal de Gibraleón, y en el que había dos personas heridas.
Ante este aviso se presentaron en el lugar los servicios sanitarios y un equipo de atestados, hallando a dos personas con heridas leves no sangrantes y un vehículo con algunos daños en la parte frontal.
Inicialmente las dos víctimas manifestaron que circulaban por la mencionada vía cuando un vehículo de grandes dimensiones que transitaba en sentido contrario, obligó al conductor a realizar una maniobra "brusca que les hizo salir del camino cayendo por un pequeño talud, sin que recordaran ningún dato del vehículo responsable" que pudiera facilitar su identificación y habiendo resultado heridos de carácter leve los únicos dos ocupantes del vehículo supuestamente siniestrado.
Los agentes del Equipo de Atestados e Informes de la Guardia Civil de Tráfico de Huelva observaron indicios que hicieron sospechar de que el vehículo llevaba días sin ser puesto en marcha y que para llegar al lugar donde se encontraba fue remolcado por otro vehículo, pues se encontraron restos de cuerdas en el eje delantero. Además el airbag no había saltado y en la carretera no había ningún tipo de vestigios que indicaran que se había producido un accidente.
Tras algunas gestiones y posteriores entrevistas con los implicados, debido a que no cuadraban las versiones ofrecidas, los agentes descubrieron que se trataba de una simulación de accidente y que podría tener como fin el de dar un falso parte de siniestro al seguro. Además de la simulación, con la acción de estas personas se ocasionó un perjuicio a los distintos servicios de emergencias que acudieron al lugar, detrayéndolos de sus funciones y de otros servicios.
Comprobadas estas circunstancias los implicados llegaron a reconocer los hechos, siendo imputados y puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia.
