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Provincia de Granada

Continúa sin nuevas pistas la búsqueda de la mujer de Santa Fe desaparecida

Está previsto que el helicóptero del Cuerpo Nacional de Policía se vuelva a incorporar esta semana a las labores de búsqueda, en las que también colaboran efectivos de Protección Civil y vecinos de Santa Fe que conocen a la desaparecida

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El dispositivo de búsqueda activado para localizar a Lourdes Merino, la mujer de 47 años de Santa Fe (Granada) que permanece desaparecida desde el viernes 17, ha continuado este lunes con la labores de rastreo sin que por el momento se hayan encontrado nuevas pistas sobre su paradero.

   Fuentes de la Policía Nacional han explicado a Europa Press que el dispositivo sigue estando integrado por la Brigada de Seguridad Ciudadana y de la Policía Judicial; además de la Unidad de Subsuelo de este cuerpo, efectivos de la Policía Local y Bomberos.

   Está previsto que el helicóptero del Cuerpo Nacional de Policía se vuelva a incorporar esta semana a las labores de búsqueda, en las que también colaboran efectivos de Protección Civil y vecinos de Santa Fe que conocen a la desaparecida.

   En este tiempo se han realizado inspecciones por la red subterránea de la ribera del Beiro, zonas próximas al antiguo acuartelamiento de los Mondragones, alcantarillado y aljibes. Asimismo, se ha rastreado la ciudad desde el aire y las zonas de la periferia mediante la ayuda de los Bomberos.

   Aunque la familia y la Policía han recibido varias llamadas de ciudadanos que han creído reconocer el rostro de Lourdes en los carteles que se han distribuido por la ciudad, aún no se han obtenido pistas certeras sobre su paradero.

   El portavoz de la familia explica que el día de los hechos, Lourdes y su marido habían acudido al hospital porque ella estaba sufriendo ansiedad desde hace unos días. Al parecer, la mujer se bajó del coche una vez estuvo aparcado y desapareció del lado de su pareja mientras él estaba cogiendo algunas cosas del coche.

   Cuando desapareció, Lourdes, que tiene dos hijos, uno de 15 y otro de diez años, llevaba puesto un pantalón de chándal negro y una sudadera azul marino.

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