La sociedad Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam), participada en solitario por el Ayuntamiento hispalense, ante las más de 7.000 toneladas de basura acumuladas en Sevilla a cuenta de la huelga de once días vivida en esta empresa, ha recogido ya 5.071.810 kilogramos de residuos sólidos, según han informado a Europa Press fuentes municipales. Este tonelaje de basura, cruzado con los datos históricos de estas fechas en cuestión, pone de relieve que desde la anulación de la huelga indefinida, habrían sido recogidos 2.486.220 kilos de basura más allá de lo habitual.
La huelga indefinida que desde hacía ya once días pesaba sobre el servicio de limpieza pública y recogida de basura de Sevilla concluyó la noche del pasado jueves al aprobar finalmente la asamblea de trabajadores la propuesta de acuerdo pergeñada entre la directiva, el Gobierno municipal y la representación de la plantilla. Atrás quedaron once días de un agrio conflicto entre el Gobierno municipal de Juan Ignacio Zoido (PP) y la plantilla, un intenso cruce de acusaciones y más de 7.000 toneladas de basura por toda la ciudad.
Dado el caso, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento, Maximiliano Vílchez, anunciaba el comienzo de un dispositivo especial para "limpiar toda la ciudad en una semana". Este dispositivo especial, estructurado en tres turnos que operan a las 23,00 horas, las 07,00 horas y las 14,20 horas, comenzó a funcionar inmediatamente después de ser desconvocado el paro técnico a las 21,30 horas del jueves. Cuenta, así, con 30 vehículos y cerca de 140 operarios por cada turno.
De estos 30 vehículos, 20 serán recolectores de carga trasera y otros diez de carga lateral, auxiliados cada uno de ellos por cuatro y tres operarios respectivamente.
Según la información que maneja Lipasam, el "gasto extraordinario" de este dispositivo especial en concepto de horas extra y materiales mecánicos se eleva a aproximadamente 750.000 euros, toda vez que la empresa dejará de pagar cerca de 1.250.000 euros a los trabajadores en la nómina de febrero a cuenta de las once jornadas de paro técnico.
