El Ayuntamiento de Jaén ha anunciado este miércoles que el próximo año congelará los impuestos, tasas y precios públicos sobre los que tiene competencia, de manera que "ni siquiera" se actualizarán con el IPC.
Así lo han indicado en rueda de prensa el alcalde, José Enrique Fernández, y el concejal de Hacienda, Miguel Contreras, quien ha basado la medida en la "sensibilidad" y el "esfuerzo" del equipo de gobierno del PP con los ciudadanos, y de manera especial en muchos casos empresarios, y ello a pesar de la "quiebra técnica" de las arcas municipales.
De este modo, se mantienen los impuestos de bienes inmuebles en sus facetas rústica y urbana, de actividades económicas; construcciones, instalaciones y obras, vehículos y sobre el incremento del valor de los terrenos, según ha precisado el edil, quien ha recordado que en el actual ejercicio se "rebajó" el impuesto de vehículos --que afecta a más de 70.000 personas--, mientras que los demás "también permanecieron congelados".
En cuanto a las tasas, subieron el IPC, aumento que no se producirá en 2013, puesto que tras el proceso de revisión realizado en octubre sobre informes de técnicos municipales y del CES, se "ha decidido congelar y no incrementarlos". En concreto, se trata de las relativas a reserva de espacio y entrada de vehículos (vados), así como la tasa de mercados, quioscos, veladores y mercadillo.
Contreras ha explicado que en 2012 la suma total recaudada por el Ayuntamiento por estos conceptos ha ascendido a 1.523.000 euros y, en caso de haber aplicado una subida del IPC del 3,5 por ciento como planteaban los estudios, hubiera supuesto de cara al próximo ejercicio 53.315 euros más. "Es una cantidad que el Ayuntamiento asume como ingreso que no percibirá, pero seguro de que beneficiará a muchos personas y empresas", ha apuntado el concejal como motivo para mantenerlos, a pesar de la "quiebra técnica" del Consistorio, cuyos responsables entienden "necesario" este "esfuerzo" al ser "conscientes de la situación general".
PRESUPUESTOS A FINAL DE ENERO
Precisamente la recaudación vía impuestos y tasas es uno de los elementos básicos a la hora de elaborar los presupuestos de la ciudad que se llevarán al pleno para su aprobación "en la última quincena o semana de enero", tal y como ha apuntado el alcalde. Al respecto, ha añadido que esperan conocer los detalles de las cuentas autonómicas, de las que depende parte de los ingresos, como la participación en los tributos de la comunidad autónoma (Patrica).
Junto a ello, también se está haciendo un "estudio muy riguroso de los gastos vinculados a personal", dado que el pago de las nóminas es la "verdadera angustia de todos los meses". Por ello, se estudian medidas que profundicen en la contención del gasto del capítulo uno del presupuesto y, por ejemplo, se espera cerrar este mes la negociación con los sindicatos para ampliar el horario semanal además de "ver otros muchos flecos" como la eliminación de productividades.
Por otro lado, Fernández de Moya se ha referido a otra cuestión no menos importante a la hora de realizar las cuentas, como son las concesiones por determinados servicios. Según ha dicho, es "inminente la salida y firma del pliego" de los que hasta ahora venía prestando Imesapi sobre semaforización y mantenimiento de alumbrado, fuentes y mercados.
RECOGIDA DE BASURA
Más despacio va el proceso para renovar la adjudicación de la recogida de basura y limpieza viaria que por el momento corre a cargo de FCC Medio Ambiente. El alcalde ha destacado que se está estudiando "de forma concienzuda" al tratarse de un contrato de larga duración, de entre 20 y 25 años, y, sobre todo, por la necesidad de reducir su coste.
De hecho, Fernández de Moya ha recordado el "desfase fijo anual" de nueve millones de euros como resultado de los 15 millones que supone al año la prestación y los seis millones de euros que se ingresan directamente por la tasa de basura. Por ello, se bajará el precio de licitación que, por el momento, se mueve entre los 12,5 y 13 millones de euros anuales con el objetivo de "ir intentado soslayar esa brutal deuda".
En este sentido, ha comentado que se están barajando variables que hagan factible esa disminución sin perjudicar el servicio. Entre ellas, ha citado dejar de recoger la basura de lunes a domingo, de modo que probablemente se suprimirá un día, y otras relativas a "turnos, coste de servicio nocturno y establecer cambios de horarios, la carga lateral...". "Es un pliego complejo, durante muchos años, por lo que no es que no haya prisa, pero con seriedad y responsabilidad", ha concluido.