A partir del mes de septiembre, Sanlúcar volverá a contar con el programa de orientación laboral Orienta, que hasta el pasado 26 de abril venía funcionando en las dependencias de Fomento coordinado por la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir y que dejó de hacerlo debido a la quiebra técnica de la entidad mancomunada.
Así lo ha anunciado el delegado municipal de Fomento de Empresas, Juan Marín (CIS) quien ha detallado que, además de retomarse el servicio que se presta desde Sanlúcar a los desempleados de la Costa Noroeste, éste se verá ampliado con respecto al anterior.
En total serán ocho técnicos, seis de orientación laboral para desempleados y dos específicos, uno para jóvenes y otro para mujeres. El equipo lo completarán dos administrativos. El coste de contratación del personal, que supera los 344.000 euros, es asumido al cien por cien por la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía. Los trabajadores serán seleccionados por el Servicio Andaluz de Empleo, en base a la experiencia de los candidatos al puesto como asesores laborales, lo que podría permitir la incorporación de los antiguos técnicos. “Es una buena noticia para Cádiz, una de las provincias más afectadas por el desempleo, y también para nuestra ciudad que desde el mes de abril se encontraba sin servicios de orientación salvo los que prestaba el SAE”, destaca Marín. Es la primera vez que el Ayuntamiento de Sanlúcar asume de forma directa la gestión de este servicio “que va a conllevar que los desempleados de la localidad puedan ser asesorados en la búsqueda de su empleo”, afirmó el responsable municipal de Fomento.
Marín aprovechó para dar “un tirón de orejas” a los responsables de la Diputación provincial de Cádiz, señalando que el servicio del Club de Empleo “será la única herramienta de asesoramiento laboral que no podamos tener en Sanlúcar este año puesto que la actitud del señor Loaiza y el señor Romaní es vergonzosa, ya que no nos cogen ni el teléfono”. Del mismo modo, el responsable municipal de Fomento recriminó al grupo municipal popular “que sólo se preocupe por poner un cartel en un parque con el horario de apertura y que no sean capaces de arrimar el hombro e instar a sus compañeros de partido a resolver este asunto” que ha provocado que desde el pasado mes de febrero no esté funcionando este servicio.
