Este recorte, que se corresponde a una política integral de austeridad del Gobierno ante la crisis económica, no viene más que a poner de relieve una situación que el Campo de Gibraltar viene arrastrando en los últimos años, como es el escaso impulso que la inversión estatal ofrece a sus carencias en materia de infraestructuras.
Así, analizando los Presupuestos Generales del Estado de los últimos diez años, encontramos partidas similares de inversión anual para las mismas partidas un año tras otro, proyectos que siguen formando parte de las necesidades de futuro de la comarca, y que siguen correspondiéndose al compromiso de los gobiernos de uno u otro signo político.
Partidas que, además, vienen formando parte de esos compromisos y esas inversiones desde hace más de diez años, con lo que los ciudadanos del Campo de Gibraltar siguen esperando año tras año las mismas promesas sin encontrar en cifras y datos reales una respuesta contundente.
El ejemplo más evidente de esta situación es el proyecto de electrificación de la línea ferroviaria Algeciras-Bobadilla, que se enmarca dentro de la exigencia del Campo de Gibraltar de contar con la alta velocidad para mejorar sus comunicaciones y sus posibilidades de progreso.
En este proyecto, los presupuestos estatales de los últimos diez años dejaron una inversión de 119.750.660 euros, una cantidad muy inferior a otros proyectos similares, y que ha supuesto sólo un 6,7% de la inversión total que el Estado ha realizado en la comarca en los últimos diez años.
En defensa de estas raquíticas cifras, hay que señalar que el proyecto de alta velocidad de la Algeciras-Bobadilla ha estado paralizado por los plazos para la elaboración de los estudios de impacto ambiental, que han requerido de un menor esfuerzo inversor. Además, en el último ejercicio en curso, se ha dado un importante impulso a las obras, que el Gobierno ha sacado de su política de recortes, aunque con una ridícula partida de 675.320 euros para 2011.
Carreteras
Más grave es la situación inversora en el Campo de Gibraltar en materia de carreteras, donde además este año ninguna partida presupuestaria ha superado los 134.000 euros, cumpliéndose el planteamiento del Gobierno de congelar las obras de carretera por su política de austeridad y primar otras infraestructuras como la ferroviaria.
Esta paralización pone de relieve la necesidad existente en la comarca de mejora en materia de comunicaciones, una premisa imprescindible para el progreso y modernización de la zona, y que cuenta aún con muchas trabas.
Una de ellas es la tan demandada construcción de la autovía A-48, que comunicará Algeciras con Tarifa y Vejer, salvando el obstáculo de la actual carretera N-340, donde además se produce un número elevado de accidentes a lo largo del año.
Esta infraestructura ha contado en los últimos diez años con una inversión de 135.081.700 euros, una cantidad que representa el 7,6% del total de inversiones realizadas por el Estado en el Campo de Gibraltar en este periodo.
También en materia de carreteras, se viene viendo frenado en los últimos años el esfuerzo inversor del Gobierno para ejecutar el desdoble de la carretera N-350, para el Acceso Sur al puerto de Algeciras, una obra que representa una exigencia de las infraestructuras portuarias para mejorar su comunicación y que, sin embargo, se ha visto también congelada por la política de austeridad impulsada desde el Gobierno ante la situación actual de crisis económica.
Este proyecto, que se inició con la primera legislatura socialista, ha asumido desde entonces (en los últimos siete Presupuestos Generales del Estado) un total de 5.415.000 euros, una cantidad que evidencia la poca contundencia con la que se está prosperando en esta materia.
Las obras viarias, además, cuentan con pocas expectativas de inversión en los próximos presupuestos, ya que, de momento, el planteamiento trazado por el Gobierno en las actuales cuentas estatales destina partidas únicamente para la continuación de estudios de evaluación previos al inicio definitivo de las obras previstas en la zona.
Industrias
En contraposición a la escasez inversora en materia de infraestructuras, y salvando el caso inalcanzable de la inversión que recibe el puerto de Algeciras, el otro gigante de los Presupuestos Generales del Estado en el Campo de Gibraltar es la industria.
Así sucede con el Plan de Reindustrialización, iniciativa impulsada también por la primera legislatura socialista, y que sólo se lleva a cabo en el Campo de Gibraltar y El Ferrol, para la regeneración de empleo mediante préstamos a empresas.
Así, las partidas destinadas a este objetivo han recibido en los últimos diez años un total de 397.416.000 euros, una cantidad que, pese a haberse empezado a desarrollar a partir de 2005, ya representa el 22,5% del total inversor de los últimos diez años.
Obras pendientes
Otros proyectos, que se siguen acumulando año tras año en los propósitos estatales en los Presupuestos Generales del Estado, y que aún se mantienen en la cola de necesidades de la comarca son obras como la depuradora de Algeciras, el corredor ferroviario de la Costa del Sol, la variante de la A-7 entre Algeciras y San Roque o el nuevo edificio de la Seguridad Social.
Proyectos que engordan la lista de las cuentas pendientes del Estado con el Campo de Gibraltar, donde, en los últimos diez años, sí se han cumplido algunos objetivos, como la ejecución de la A-381, el helipuerto de Algeciras o el Centro de Inserción Social (CIS) de la prisión de Botafuegos.
