El Personal Técnico de Integración Social (PTIS) e Intérpretes de Lengua de Signos de España (ILSE), se han echado a la calle y han convocado huelga indefinida para este 21 de noviembre, día en el que también acudirán a Sevilla para realizar una nueva manifestación.
Y es que sus reclamaciones, a pesar de las protestas llevadas a cabo en las últimas semanas, siguen cayendo en saco roto y la Junta de Andalucía sigue haciendo caso omiso a sus reclamaciones, tal y como indicaron durante la última protesta consistente en una concentración a las puertas de la Delegación Territorial de la Consejería de Educación de la Junta, en la Plaza de Mina de la capital gaditana. Una concentración convocada por Comisiones Obreras y secundada por el resto de sindicatos, al tiempo que contó con el apoyo de prácticamente todas las fuerzas políticas e instituciones públicas.
La situación de los PTIS es, cuanto menos, lamentable y precaria laboralmente hablando. De hecho, ningún personal técnico de integración social (PTIS) está a jornada completa en los centros educativos públicos de Cádiz, es decir, les es imposible atender al alumnado con necesidades educativas especiales de 9 a 14 horas, con lo cual, la pregunta que cualquiera puede hacerse es qué pasa con esos alumnos si tienen un problema cuando no está el monitor…
Es por ello que los PTIS han exigido la jornada completa en beneficio del alumnado, así como de la verdadera inclusión y de una educación de calidad, reclamaciones que se expresaban en la pancarta ‘Garantía y solución para el personal que atiende al alumnado con necesidades educativas especiales en centros educativos públicos’ que portaba el más de un centenar de monitores de Educación Especial de toda la provincia que acudieron a la concentración.
Hablamos de un servicio que la Junta ha externalizado, a pesar de ser esencial. Y lo ha hecho contratando los servicios de la empresa gallega Osventos y que según señalan desde UGT, sindicato que ha interpuesto una demanda contra la misma, “no cumple con el pliego de condiciones” de la licitación, algo de lo que también tiene su culpa “la Junta”.
Víctor Pulido, representante del comité de empresa de los PTIS, no dudaba en afirmar que “vamos a endurecer las protestas porque estamos desesperados” y es que “la empresa Osventos, a la que la Junta de Andalucía ha dado el servicio, no reconoce las tablas salariales que aparecen en nuestro convenio; no reconoce tampoco el complemento de antigüedad; no nos asegura que cuando terminemos el servicio en junio nos paguen las vacaciones. Y a todo ello sumamos que estamos cobrando fuera de plazo. Todavía hay compañeros que no han percibido su nómina de septiembre ni la de octubre. Y además, han aumentado la jornada de 3 a 5 horas a algunos compañeros y eso no aparece reflejado en su vida laboral ni en su salario”.
Se sienten “desesperados e indefensos”, ha agregado Pulido tras denunciar la precariedad laboral que desde hace dos décadas viene padeciendo su colectivo. Así, teniendo en cuenta que desde el pasado 27 de octubre no se ha producido “ningún avance”, el personal técnico de integración social -que suma más de 300 personas en la provincia- comenzará una huelga indefinida “cuanto antes”. El representante del comité de empresa ha concluido que la “solución final debería pasar por la subrogación”, porque “estamos trabajando en centros educativos públicos y llevamos 20 años con cambios de empresas y cada una hace con nosotros lo que le da la gana. Como servicio público que es nuestro trabajo, debemos ser trabajadores públicos”.
Viendo que la situación no cambiaba, se convocó una segunda jornada de huelga el martes 7 de noviembre en Cádiz, secundada por la mayoría de PTIS de la provincia de Cádiz. Pero “seguimos sin que la empresa Osventos se pronuncie al igual que la Junta, que optan por el silencio como respuesta.Es por esto, que los PTIS se ven obligados a secundar la huelga indefinida a nivel andaluz. ¿Qué quiere decir esto? Que los PTIS de toda Andalucía se ponen en huelga indefinida hasta que se nos dé solución y acabe de una vez la precariedad laboral que año tras año están sufriendo”.
Provincias como la de Málaga han empezado la huelga el pasado 14 de noviembre, el resto, comienzan la huelga indefinida el próximo 21 de noviembre, con “lo que esto puede suponer para el colectivo y para los niños y niñas con necesidades educativas especiales”.
En los centros escolares de Barbate hay aproximadamente 450 niños y niñas con necesidades educativas especiales (NEE), siendo seis los PTIS disponibles y que trabajan precariamente. Es decir, es un problema que no solo afecta a los monitores, también a dicho alumnado, a sus familias y a los propios centros.