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Punta Umbría

Democracia musical y microinversiones para los nuevos artistas

Tras años de dictadura de las majors y de una mínima apuesta por nuevos valores musicales, la democracia ha llegado a la música gracias a empresas como Apadrina un Artista (AUA), que recluta inversores anónimos por internet para que desconocidos artistas vean sus trabajos publicados.

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Tras años de dictadura de las majors y de una mínima apuesta por nuevos valores musicales, la democracia ha llegado a la música gracias a empresas como Apadrina un Artista (AUA), que recluta inversores anónimos por internet para que desconocidos artistas vean sus trabajos publicados.

“Nos definimos como discográfica social y democrática, ya que hacer realidad un proyecto en AUA depende de que muchas personas estén dispuestas a apostar por ti”, dice el director de esta empresa, Xavier León, que ahora da una vuelta de tuerca al formato y pretende lanzar cien nuevos discos al mercado siguiendo esta misma estrategia.

Con el Plan 100, Apadrina un Artista, que lleva tres años en activo, rebaja el capital de inversión, dejándolo en 3.200 euros, la mitad de los cuales financiarán la propia empresa, y con ese dinero se fabricarán y pondrán a la venta 100 cd's y se hará una promoción de 200 más para los medios.

Una fórmula que, antes del Plan 100, ya ha servido a ocho grupos, como los 100 Elephants, que han visto su álbum, Madrid-Girona-Barcelona, editado tras años de búsqueda de sello discográfico y financiación.
Un proyecto social, porque son gentes anónimas las que mediante donaciones permiten la producción del trabajo, y democrático, porque no hay un filtro inicial de calidad, los artistas cuelgan en la red una maqueta y es el público quien decide si apostar por ellos o no.

“Apadrina un Artista no juzga la calidad ni las posibilidades de los trabajos, el auténtico filtro lo ejercen los inversores. Ellos son quiénes deciden si un disco merece salir al mercado”, afirma León.

Inversores que ejercen también de socios y “accionistas” del disco que salga a la venta cobrando parte de los beneficios obtenidos, una cifra que acuerdan con el grupo al que han apoyado.

¿Pero de dónde salen las microinversiones? “Es el caso de las 3F, fools, friends & family. Familia, amigos y gente que no conocíamos de nada (fools) y que gracias a una campaña muy intensa llegaron a nosotros y decidieron apostar muy fuerte”, dice el componente de 100 Elephants, Jordi Molas.

AUA y los eclécticos 100 Elephants, cuya música hay quien define como “rock introspectivo poliédrico”, entienden que el futuro musical pasa por crear nuevos caminos y hacer un uso extensivo de la red.

“Los músicos y empresas que no entiendan que todo pasa por internet están muertos. La discográfica no tiene por qué desaparecer si entiende su nuevo rol y favorece y apoya la explosión de nuevos talentos”, afirma.

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