La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha hecho entrega al Ayuntamiento de Málaga del acta de finalización de la restauración hidromorfológica del río Guadalmedina, que ha contado con una inversión de tres millones de euros y que "supone una importante mejora de la seguridad para la población frente a venidas de agua y la puesta a disposición de la ciudadanía de cinco kilómetros de paseos fluviales con vegetación autóctona".
Una vez concluidas las obras, como ya acordaron ambas administraciones, el Consistorio de la capital malagueña procede a encargarse de la conservación y mantenimiento.
Las obras han cumplido el plazo de ejecución establecido de 20 meses y "han permitido la creación de un nuevo pulmón verde para la ciudad en una superficie total de 50.000 metros cuadrados, correspondiente con los paseos fluviales, a lo que se añade la mejora de la calidad ambiental en 200.000 metros cuadrados, que es la que tiene el tramo de cauce que ha sido objeto de las obras". La actuación también ha incluido la modificación de la morfología del cauce para generar un clásico riachuelo.
Crespo ha valorado "la apuesta del Gobierno de Andalucía por la restauración hidromorfológica de cauces de ríos y ramblas en la comunidad autónoma" y ha señalado que, "en esta actuación en el río Guadalmedina hemos eliminado de su cauce la totalidad de las especies vegetales invasoras y exóticas, retirando 2.000 toneladas de residuos".
En este punto, ha subrayado que "hemos plantado, entre el cauce y los paseos fluviales, un total de 50.000 especies arbóreas, arbustivas y herbáceas, destacando la cifra de 1.247 árboles, entre otros, algarrobos, laureles, sauces, tarayes, así como encinas o chopos".
Asimismo, ha explicado que "la restauración hidromorfológica del río Guadalmedina también supone un acicate para la reactivación socioeconómica del entorno, gracias a la integración urbana del tramo fluvial comprendido entre el puente de la Autovía del Mediterráneo y el Puente de Armiñán".