No fue necesario finalmente que CGT y patronal de la industria del metal se sentaran este lunes en el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía porque el sindicato decidió desconvocar la huelga indefinida en el sector del metal. CGT remitió sendos escritos al Sercla y a la Federación de Empresas del Metal de Cádiz (Femca) informando de la decisión, 48 horas después de la tomada por la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) en la misma línea.
CTM cargó contra las acciones de “desmovilización” del comité de empresa de Navantia y la patronal y aseguró que los empleados favorables a los paros fueron despedidos. Estos, agregaron fuentes de la coordinadora el sábado, son los que les pidieron que desconvocaran porque “difícilmente pueden secundarla si están en paro” y así obraron.
En cualquier caso, CTM remarcó que reforzará la campaña de denuncias por incumplimiento del convenio, y reitera su exigencia de reincorporar a cuatro empleados en la empresa auxiliar, Mecamansol, cuyo despido sirvió de detonante a una semana y media de movilizaciones y tensión en el sector.
La patronal, sin embargo, no da por finalizada la batalla y presentará una demanda contra CGT y CTM por “haber incumplido la normativa en sus convocatorias de huelga”. Respecto a CGT, explicó que la huelga no se había convocado con los diez días de antelación que la norma exige para los casos en los que hay que nombrar servicios mínimos, imprescindibles en sectores como los del mantenimiento de ascensores o los relacionados con la electricidad y el agua, han indicado. En cuanto a la convocatoria de CTM, los motivos era una relación de “generalidades e indefiniciones incomprensibles” para la patronal.
Además, el presidente de Femca, Diego Chaves, lamentó las consecuencias de las movilizaciones llevadas en la última semana y media en declaraciones a COPE Cádiz. Chaves remarcó que “el daño ya está hecho”, con la pérdida de la carga de trabajo en el astillero de Navantia de la capital” y advirtió de que “nos va a costar la misma vida que los clientes piensen que somos capaces de dar un servicio de calidad”, después de esto y cuando hace menos de dos años “ardió Cádiz” por la negociación del convenio. Por ello, las empresas están valorando las pérdidas, que solo con un barco alcanzan los dos millones de euros, para reclamar perjuicios a CTM y CGT.
Entretanto, UGT, comité de empresa del astillero y Navantia se afanan en recuperar parte de la carga de trabajo y reincorporar a 80 empleados, después de que el gasero el Donald M. Jones abandonara el dique y se alojara en Gibraltar. El Seapeak Catalunya, fondeado a 15 millas de Cádiz, podría atracar el día 24 y el Wilpride, en agosto. Asimismo, negocian que permanezca en la factoría hasta el final de la faena.
