Fernando Rodríguez Villalobos cede el testigo, tras dos décadas, en la Diputación de Sevilla defendiendo el trabajo hecho, dejando superávit y pronosticando que ganará en la provincia y en la capital el PSOE, frente a la “temeridad” de equiparar los candidatos del PP con Juanma Moreno.
Llegas a los pueblos y la gente dice: mi alcalde es mi alcalde y lo votoFin de mandato, hágame un breve resumen, si puede
–La puesta en carga de dos planes muy importantes y con dos pilares, la inversión y la ayuda a la creación de empleo, o al menos, a que no se destruyera con la pandemia, hasta completar los 470 millones del Plan Contigo y el Plan Actúa, que si le sumas otros 300 del Plan Supera, que fue anterior, ya tienes ahí 770 millones de euros. ¿Cuál es la buena noticia? Que hemos liquidado el presupuesto de 2022 otra vez con superávit, 367 millones, que están ahí para la próxima corporación. Pero que si sumas los 770 y los 367, estamos en más de mil millones en este periodo y algo he tenido que ver porque he presidido esta casa.
¿Ha quedado algo en el tintero?
–Siempre quedan cosas, el que diga que no es porque es un autocomplaciente o un creído, y no lo soy. Hemos avanzado mucho y bien, porque lo hemos hecho con participación, y desde la Diputación hemos irradiado siempre a los pueblos, fundamentalmente a los más pequeños, unas ayudas que han dado infraestructuras y equipamientos. ¿Qué queda? Hay margen en los residuos sólidos. ¿Estamos cumpliendo las recomendaciones de las autoridades europeas? Eso es lo que tenemos que conseguir porque, entre otras cosas, nos vendrán fondos si cumplimos. Hemos solicitado, dentro de los Next Generation, a través de la Junta, que es la que tiene la competencia, un plan de unos 300 millones. En seguridad, en bomberos, va extraordinariamente bien, nos quedan pocos parques por inaugurar y más del 70% son funcionarios. En agua, el ciclo integral está muy avanzado pero hace falta continuar la senda de modernizar la depuración de aguas. En el tema de digitalización, muy avanzados, pero en inteligencia artificial o ciberseguridad hay que gastarse unos cuantos de millones.
¿Y el turismo? La capital está casi invadida pero ¿y los pueblos?
–El turismo, tanto en la capital como en la provincia, ha crecido exponencialmente. Otra cosa son los perjuicios, es el apartado que tienen que velar en próximos años, compatibilizar el turismo, que es una fuente de ingresos extraordinaria, con no molestar, en los pueblos se da con menos frecuencia porque esa masificación no llega. Hemos ido de la mano de los empresarios del sector dando respuesta a sus demandas y los resultados ahí están, en pernoctaciones y visitas, y no es moco de pavo, ha habido que construir infraestructuras, equipamientos en turismo de naturaleza, activo, más en zonas de sierra donde nos preocupa la despoblación. No ha sido fruto de la casualidad, ya estaba trabajado y lo que no estaba rematado, la pandemia nos lo ha rematado positivamente.
Veinte años en Diputación... ¿qué les dice a los que decían que no servían?
–Que sirven y que a ningún grupo político que tenga implantación en todo el territorio nacional y hable con conocimiento de causa se le ocurre decir que las diputaciones hay que quitarlas. Son necesarias mientras se puedan producir desequilibrios territoriales, tienes que aplicar coeficientes correctores y ayudarles a que tengan servicios y equipamientos. La gente no es tonta. Se ha trabajado, se puede mejorar, evidentemente, pero ahí está lo que hemos hecho.
¿Deja Diputación en el peor momento del PSOE en la provincia?
–No, el PSOE va a ganar las próximas elecciones y va a tener la Presidencia de la Diputación, seguro. No sé si con 19, con 18, con 16… El pronóstico es muy difícil porque depende de los partidos judiciales y cada uno es un mundo. En el panorama general, tú dices, se ha hecho por parte de los alcaldes y alcaldesas una buena gestión o no, cada uno ha hecho lo que ha creído conveniente, le hemos dado autonomía desde esta casa, pero como los municipalistas en general son gente con inteligencia, al menos cuando le ganas a otro eres espabilaete, llegas a los pueblos que en las elecciones autonómicas nos pegaron una paliza, un bofetón, y la gente dice “mi alcalde es mi alcalde, y lo voto”.
¿En las municipales no va a pesar tanto el efecto Juanma Moreno?
–Para nada. El efecto Juanma lo tuvo cuando lo tuvo, que ya no es el mismo, por cierto. Pasar eso al escenario local es una incorrección y me asombra ver cartas que envía el PP a las casas personalizando en la figura de Juanma el éxito de la futura candidata. Es una temeridad. Imagínate que pierde allí el PP, ¿es que ha perdido Juanma? Eso es el catón. No sé cómo se arriesgan, a no ser que el PP tenga malos candidatos o candidatas...
Sevilla capital es la principal ciudad que tiene el PSOE... ¿cómo lo ve?
–En Sevilla, igual que en los pueblos, la figura de Juanma Moreno no va a tener una repercusión que desequilibre la balanza. Aquí hay un alcalde que se llama Antonio Muñoz, bien valorado, que se ha metido en el corazón de los sevillanos. Y por otro lado está una excelente persona, ha sido alcalde de Tomares y no puedo decir nada negativo de un exalcalde, pero lógicamente la talla de Antonio, el conocimiento de la administración y la gestión la domina. Es una persona conocedora de la acción local, la política de la cercanía y en lo que lleva de alcalde, yo veo a Sevilla a mejor. En definitiva, ganará Muñoz, por lo tanto, el partido judicial de Sevilla y el área metropolitana va a cambiar muy poco, a mí no me salen las cuentas que ha publicado el PP.
Lo ha dicho más de una vez, que no sabe quien será su sucesor porque dependerá...
–En el PSOE, que no es que nos reunimos tres o cuatro en un bar, hay una estructura federal, regional y provincial, y a cada uno le corresponde proponer, aprobar y designar a nuestros candidatos. Eso lo tiene que decidir el partido. Tú me preguntas…
¿Quién está mejor posicionado?
–Se habla de Javier Fernández y a la pregunta, ¿tú como lo ves? Buen candidato, tiene las cualidades, lleva ganando por mayoría absoluta en su pueblo 15 ó 20 años. Primero, malo no tendrá que ser. Segundo, es la persona que ostenta la secretaría general del PSOE, es el referente del partido y nos gusta tenerlo en las instituciones que gobernamos.
Usted ha declarado que ha hablado con los posibles candidatos y les ha dicho lo que hay que hacer
– No le daré consejos a nadie. De una manera u otra, tengo comunicación con todos y buena, se fían, entre comillas, de mis conversaciones.
Conversaciones, no consejos...
–Es que no puede ser de otra manera, yo no soy nadie para decirle a uno lo que tiene que hacer. Si me preguntan, doy mi opinión, afortunadamente lo preguntan no sólo en lo local si no en otros ámbitos, pero es por la veteranía.
Porque expulsado sí que no se siente ¿no?
– No, sigo siendo miembro de la ejecutiva. Lo que pasa es que ahora le toca a otro, pero a mí se me consulta, se me llama y ahora en campaña estoy todas las tardes presentando candidatos, por algo será. Hay buen rollo, veo buen ambiente, el partido está muy unido, están trabajando todos a una, como tiene que ser. Esta es una prueba que en la política y en la democracia existe, cada cuatro años, unas oposiciones.
