La primera fase de las obras de urbanización pendientes en San Jerónimo-Las Flores va a experimentar un incremento del coste inicial del 18,25 por ciento, ya que el Ayuntamiento ha dado su visto bueno a una propuesta de modificación del proyecto solicitada por la empresa Martín Casillas, que resultó adjudicataria en abril de 2021.
Las obras se adjudicaron en 584.881 euros y con un plazo de ejecución de seis meses, pasando ahora a costar 787.534 euros, en ambos casos con el IVA incluido. De igual modo, el plazo se amplía ahora en dos meses sobre lo inicialmente previsto.
La dirección facultativa de las obras argumenta que la modificación del proyecto viene motivada por la necesidad de añadir actuaciones adicionales a las que se habían contratado.
Así, en la redacción del proyecto, ante la incertidumbre de la reparcelación final de las manzanas por los propietarios de las mismas y siguiendo las recomendaciones del Servicio de Gestión del Proceso Urbanístico, se planteó una posible parcelación para cada una de las manzanas que el tiempo ha demostrado insuficiente.
En total se contemplaba la urbanización de 28 parcelas. Sin embargo, una vez iniciadas las obras los propietarios de las manzanas tramitaron diferentes proyectos de parcelación que diferían de la reparcelación proyectada, resultando un total de 69 parcelas frente a las 28 previstas.
Las modificaciones que se han debido de introducir en el proyecto vienen a suponer un incremento generalizado de la medición de casi todos los capítulos de la obra, así como pequeñas variaciones de las líneas y ajuste de trazado.
Los capítulos afectados se refieren a las redes de saneamiento y abastecimiento, telecomunicaciones y electrificación, principalmente. Todas estas nuevas acometidas y ajustes de infraestructuras deben realizarse conjuntamente con las obras de urbanización en marcha, ya que de posponerse sería necesaria la demolición y ruina de numerosas partidas de la obra, lo que supondría un incremento de costes muy elevado de cara a un futuro, además de no dotarse a las nuevas parcelas.
Otro capítulo que se ve alterado es el correspondiente al del pavimento, que se ve aumentado. En la avenida de Espera el proyecto contemplaba la reurbanización del acerado de uno de los tramos, previéndose bajo él la ubicación de las nuevas canalizaciones y redes diversas.
En dicha ubicación se ha detectado la existencia de diversas redes en que imposibilitan su ejecución, haciéndose necesario desplazar el trazado de las nuevas redes bajo la calzada existente.
Ello supone la demolición de un tramo de la calzada actual de la avenida de Espera, así como su posterior reposición.
La Junta de Gobierno local ha aprobado recientemente la modificación del proyecto dado que las actuaciones que se contemplan resultan “estrictamente indispensables” para llevarlo a buen puerto, justificándose además “en circunstancias sobrevenidas e imprevisibles en el momento en que tuvo lugar la licitación del contrato”.
Además, se cumplen tres condiciones que resultan imprescindibles, como es que la necesidad de esta modificación “se deriva de circunstancias que la administración no pudo prever”, que los cambios propuestos “no alteran la naturaleza global del contrato” y que la alteración del precio final “no excede del 50 por ciento del inicial”.
Las obras están parcialmente ejecutadas, si bien los vecinos habían mostrado ya algunas discrepancias, entre otras cosas porque no se habían soterrado las redes eléctricas.
