El Ayuntamiento de Jerez parece dispuesto a articular mecanismos encaminados a poner fin a la especie de maldición que persigue en los últimos años a las fuentes ornamentales, que en muchos casos han permanecido sin funcionar durante varios meses como consecuencia de distintos problemas técnicos.
Precisamente con este objetivo se acaba de licitar un contrato de servicio de conservación y mantenimiento de once fuentes ornamentales por un importe total de 254.210 euros (IVA incluido) y un periodo de cuatro años que se extiende entre 2023 y 2026, contemplándose un quinto ejercicio adicional.
El Consistorio, a través de la tenencia de Alcaldía de Urbanismo, Infraestructuras y Medio Ambiente, ha seguido estos últimos años un procedimiento ordinario a través del cual ha evaluado los sistemas de funcionamiento de esas fuentes ornamentales, acometido una limpieza a fondo de los interiores.
Sin embargo, en el pliego para la licitación de este servicio admite la “imposibilidad” de acometer determinados trabajos con sus propios medios “dada la complejidad técnica” de algunas de estas instalaciones.
No hay que olvidar que estamos ante instalaciones de diferente tipología en las cuales “se desarrolla una actividad compleja que requiere instalaciones eficientes para el fin al que fueron destinadas”.
Sin ir más lejos, “las fuentes cibernéticas, de nuevas tecnologías, especiales y ornamentales son instalaciones muy sensibles a efectos de mantenimiento, ya que además de la calidad del servicio se debe garantizar también la salubridad de los ciudadanos”.
De ahí que “para garantizar un mantenimiento eficiente se establece la contratación de su mantenimiento integral como única fórmula viable”.
El contrato garantizará el buen funcionamiento de once fuentes ornamentales, la mayoría de ellas ubicadas en el centro de la ciudad.
Entre ellas se encuentran las de la plaza del Arenal, la plaza de las Angustias, la Rotonda de los Casinos, la plaza San Andrés, la rotonda del Alcázar o la del Mamelón, que ha dado infinidad de problemas estos últimos años.
Más allá del centro de la ciudad, también se contempla el mantenimiento de las dos fuentes de la plaza del Caballo y las del Altillo, Sementales y la avenida de Europa (monumento al arrumbador).
El contrato pretende garantizar las condiciones de servicio necesarias para el normal desarrollo de la actividad y dar cumplimiento a las exigencias normativas técnico-legales.
Se establece un mantenimiento preventivo, pero también otro correctivo que, operando bajo protocolos de comunicación y tiempo de respuesta establecidos, subsane las averías que se fueran produciendo, entre las que se encontrarían las reparaciones y servicios de urgencia, gestión documental de los mantenimientos y actualización de la información técnica sobre las instalaciones, incluida su planimetría.
También se contempla un mantenimiento conductivo, con visitas periódicas a las fuentes para comprobar su funcionamiento, incluyendo en cada caso la retirada de sólidos flotantes y una limpieza general.
Por último, el contrato garantiza un mantenimiento técnico y legal para cada tipo de instalación en base a la reglamentación vigente.
El Ayuntamiento trasladará cualquier incidencia a la empresa adjudicataria de este servicio. Así, concluida la fase de recepción del aviso se establecerá por defecto un plazo de 48 horas para atender incidencias “normales”, que se reduce a ocho horas si hablamos de “urgencias”.
Excepcionalmente se podrá fijar un plazo inferior de respuesta cuando las circunstancias así lo exijan ya sea por verse afectada la integridad de los viandantes o porque la incidencia suponga un peligro para las infraestructuras o bienes municipales.
El pliego de condiciones garantiza por tanto el mantenimiento de estas once fuentes ornamentales, que son quizá las que requieren de un mayor esmero dada la complejidad de sus mecanismos, tal y como advierte el propio Gobierno local a la hora de justificar la prestación externa de este servicio.
No hay que dejar de lado que muchas de esas fuentes están preparadas para ofrecer diversos efectos que complican su mantenimiento, entre otras cosas porque las averías se producen con una mayor frecuencia.
Este contrato va a permitir por tanto que los trabajadores municipales se ocupen del mantenimiento de aquellas otras fuentes que pueden presentar un número más bajo de incidencias y requieran también de una menor especialización.
Las empresas que estén interesadas en hacerse con este contrato municipal -que trata de tener a las fuentes ornamentales bajo control- pueden presentar sus ofertas hasta las 23.59 horas del próximo jueves 1 de diciembre.