“A mi me hace tilín estar en Manhattan y comerte un ajoblanco, y a los americanos, también”, apuntaba Dani García para intentar explicar el espíritu que le ha movido a embarcarse en un proyecto que cuenta con un crédito participado de la Junta (600.000 euros) y cinco líneas de negocio, laboratorio de investigación incluido.
El consejero de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía, Luciano Alonso, que presentaba la iniciativa junto al chef malagueño, resumió que este proyecto es “un buen instrumento” para la promoción de Andalucía, ya que fomenta y traslada los valores que “identifican y diferencian” a la región frente a otros competidores con productos autóctonos como las tapas. En este sentido, añadió que, de nuevo, se ha superado el concepto de segmento “para hablar de sentimientos y emociones”.
Precisó que esta iniciativa ha sido un trabajo de meses que “no ha dejado nada al azar” y apuntó en rueda de prensa que Andalucía “necesita de gente que se comprometa con Andalucía”. “Donde haya una moraga -en referencia al nombre de la franquicia- habrá promoción de la región y es el único encargo que le he hecho a Dani García, que es un magnífico embajador”, aseveró.
Esta franquicia, que nace como “experiencia piloto”, permitirá trasladar la gastronomía andaluza y las recetas que se perdieron. Cuenta con cinco líneas de negocio, como son Gastrobar (de tapas), Casa de Comidas (recuperar la comida tradicional y los menús), Sweet, especializado en postres; Airport, adaptado a estos recintos, e Ibérico, cocina en directo basada en el cerdo ibérico; así como una línea de investigación, desarrollo e innovación, que se conocerá como Gastrolab.
Igualmente, cada local contará con venta de productos gastronómicos andaluces y folletos informativos sobre los encantos y la oferta turística de la Comunidad Autónoma. En este sentido, el responsable andaluz de Turismo manifestó que es una iniciativa que “aporta un interesante valor añadido al tejido empresarial con una nueva estructura de negocio que abre un nuevo camino para otras iniciativas y supone un importante canal para la internacionalización de las empresas”.
Respaldo de la Junta
La Consejería de Turismo, Comercio y Deporte aporta a este proyecto un crédito participativo de 600.000 euros aprobado en el marco financiero de los Fondos Andaluces Reembolsables de Apoyo. Asimismo, cuenta con el respaldo de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa que, según indicó el secretario general de Universidades, Francisco Triguero, permitirá otorgar un “plus de diferenciación y calidad a nuestro destino”.
Concretamente, el laboratorio, en principio se instalará en el Centro de Innovación de la Universidad de Málaga, situado en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), aunque anunció que en el plazo medio de dos o tres años contará con un edificio propio en la tecnópolis.
Triguero añadió que será “un emblema” de lo que, a juicio del Ejecutivo, debe ser la transformación de los sectores productivos. “Es un prototipo de implicación de todo el sector, desde las universidades, y pretende investigar y aplicar los nuevos conocimientos a un proyecto solvente que aporta conocimiento y beneficia al tejido productivo”, puntualizó.
Por su parte, el chef malagueño manifestó que el mundo de la tapa es “la cocina de la libertad”, ya que “te da la posibilidad de hacer de todo y es la manera más fácil y exportable de llevar Andalucía”.
De hecho, en poco más de un mes estará en el aeropuerto de Málaga “y tenemos la suerte que de la mano de SSP -empresa especializada en este tipo de recintos- llegaremos al aeropuerto JFK de Nueva York, al Charles de Gaulle de París o a Heathrow, en Londres”, entre otros.
“La verdad es que me hace mucha ilusión llevar un gazpacho al JFK o unas croquetas de pringá y mucho morbo también llevarlo a que lo coman los franceses, que saben mucho de cocina”, apostilló.
Otra de las particularidades de esta iniciativa es que se quiere recuperar el menú del día, un concepto que, según el chef, “se ha perdido en España en general”. Igualmente, los dulces tendrán su papel protagonista en 'La moraga sweet', que irá de la mano del maestro pastelero Paco Torreblanca, “que convertirá la alta cocina en dulce”.
El pasado año la gastronomía fue el motivo principal para visitar Andalucía de más de 650.000 personas, según señalo ayer el consejero de Turismo, quien consideró que es uno de los segmentos “mejor posicionados” en la cualificación de la marca Andalucía, ya que “aporta singularidad y fortaleza y responde a la búsqueda de experiencias”, además de reducir la estacionalidad.
El objetivo de La Moraga es el de recoger las recetas andaluzas dotándolas de un carácter artesanal y apoyado por todos los vinos que se realizan en Andalucía, difundiendo la comunidad a través de la gastronomía mostrada en diversas manifestaciones.
Además, la iniciativa crea puestos de trabajo. En estos momentos, según Dani García, cada local cuenta con 20 personas, por lo que en total son 80. Un número que crecerá a medida que se incorporen nuevos locales a esta franquicia que es, a juicio de Alonso, “un producto muy potente” en el que el Gobierno andaluz “pone más pasión que dinero”.
Alonso destaca la ubicación de la Escuela Pública de Golf de El Toyo
Por otro lado, el consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, presentó ayer en Fitur el proyecto de la Escuela Pública de Golf que su departamento construirá en El Toyo, y que, con una inversión prevista de cinco millones de euros, convertirá a esta zona en un “referente turístico y deportivo” de la capital almeriense.
La instalación, cuya ubicación fue calificada como “estratégica” por Alonso, se situará en la parcela 2, cuya titularidad corresponde a la Junta de Andalucía, y se construirá en dos fases.
En primer lugar, se instalará una calle de prácticas, que tendrá como singularidad que será elaborada con granulado de mármol verde de Macael, un green de prácticas, y una zona de approach; así como un Centro de Raqueta con seis pistas de pádel y cuatro de tenis. También se incluyen otras instalaciones complementarias como una casa club, zona de restauración y servicios, y almacenes.
La segunda etapa incluirá dos nuevos espacios deportivos: un Centro de Actividades en el medio natural en el que se potenciarían prácticas como vela ligera, kayak de mar, submarinismo, remo o ciclismo; y otro Centro de fitness y wellnes. Asimismo, se realizaría una ampliación de la oferta de golf con la construcción de nueve hoyos y de raqueta con nuevas pistas de tenis y pádel.
En este sentido, el titular de Turismo insistió en que la futura escuela servirá como foco de atracción de nuevas inversiones para infraestructuras y actividades complementarias, y supondrá “el impulso necesario para continuar con la labor de transformar El Toyo en un destino turístico de excelencia”.
La Escuela Pública de Golf será, además, una referencia por su carácter sostenible, ya que se tienen en cuenta aspectos como el menor impacto ambiental y la máxima eficacia en el uso del agua de riego, la integración de esta infraestructura con el entorno turístico, la compatibilidad con la oferta deportiva existente en la zona y en la ciudad, y la viabilidad económica y social de la instalación, explicó Luciano Alonso.
