Ecologistas en Acción han reprochado a la Junta de Andalucía que "facilite" la reapertura de la mina de Aznalcóllar (Sevilla) 21 años después de la rotura de la balsa de lodos de la empresa sueca Boliden, a Minera Los Frailes, "una empresa que --a su juicio-- miente".
Tras recordar el suceso del 25 de abril de 1998 en la mina de Aznalcóllar que dejó seis millones de metros cúbicos de lodos desparramados por la cuenca del Guadiamar afectando a enclaves de gran importancia ecológica en el Espacio Natural Doñana, ha advertido de que Minera Los Frailes "se ha autoadjudicado una concesión de explotación que ni siquiera existe".
Así, ha señalado que Ecologistas en Acción usará "todas las herramientas jurídicas a su alcance para impedir una reapertura que ponga en riesgo la seguridad ambiental" y ha insistido en que "no puede existir una concesión minera sin que previamente se realice toda la tramitación ambiental completa".
Esto, según ha explicado, incluye, primero, una Evaluación Ambiental Estratégica (EAE) del Plan Especial que establezca el marco de actuaciones futuras, y posteriormente, una Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) del Proyecto de Explotación y Plan de Restauración, que conduzcan finalmente a la Autorización Ambiental Unificada (AAU).
Ecologistas ha indicado que la Junta de Andalucía ha iniciado ambas tramitaciones simultáneamente, "vulnerando los objetivos y fines de ambas evaluaciones ambientales". Y además, ha hecho hincapié en que "la Junta ha tramitado la EAE, incumpliendo la Ley de Transparencia y con los mismos vicios de nulidad que recientemente han conducido a la nulidad del Plan Especial de la mina de Cobre Las Cruces y de la AAU de la mina de Riotinto".
Tras recordar que Minera Los Frailes "ni siquiera participó en el concurso minero convocado y resuelto por la Junta en 2015 a favor del consorcio Minorbis-Grupo México", ha destacado que la empresa ha solicitado a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) una concesión de aguas subterráneas de un millón de metros cúbicos, apuntado que "probablemente será necesario triplicar esta concesión", mientras que, ante los órganos de participación de Doñana, la empresa ha declarado que "será autosuficiente" en cuanto al abastecimiento de aguas.
RESTAURACIÓN FINAL DE LA MINA DE AZNALCÓLLAR
Ecologistas en Acción ha explicado que el concurso minero establecía que hay que atender los pasivos ambientales y de seguridad, mediante la ejecución del Plan de Adecuación Ambiental de las Labores de Desmantelamiento y Restauración Final de las instalaciones de la Mina de Aznalcóllar del año 2001.
En este sentido, critica que el proyecto de Minera Los Frailes se basa en la restauración progresiva, extrayendo mineral a la vez que se controlan los pasivos que se le hacen "indispensables" para el funcionamiento y advierte de que se puede dar un cierre empresarial y dejar la restauración "otra vez a cargo de la administración".
Por último, ha destacado que para explotar la Corta de Los Frailes se necesita vaciar previamente los 14 millones de metros cúbicos de aguas ácidas muy contaminadas que se han acumulado desde su abandono en 2001. En este sentido, ha puesto en duda la depuración que Minera Los Frailes dice hará para poder verterlos al Guadiamar, Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000.
