El primer ministro nipón, Shinzo Abe, condenó "enérgicamente" el nuevo ensayo nuclear de Corea del Norte, y aseguró que Japón ofrecerá una "firme respuesta" ante lo que considera una "grave amenaza" para su seguridad.
"La prueba nuclear de Corea del Norte es una grave amenaza para la seguridad de nuestro país, no podemos tolerarla de ninguna manera", indicó el jefe del Ejecutivo nipón en rueda de prensa.
Abe habló a los medios poco antes de las 13.00 hora local (04.00 GMT) tras el anuncio, media hora antes, de Corea del Norte en el que el régimen de Pyongyang aseguró en su televisión estatal haber realizado su primera prueba con una bomba nuclear de hidrógeno.
"(El test) viola claramente las resoluciones del Comité de Seguridad de las Naciones Unidas y es un desafío grave contra las medidas que estamos llevando a cabo para lograr la desnuclearización mundial", insistió el primer ministro japonés.
Abe aseguró que Japón, que recientemente fue designado país miembro no permanente del Comité de Seguridad de la ONU, estrechará su cooperación con Estados Unidos, Corea del Sur, China y Rusia "para tomar medidas integrales".
El ministro japonés de Asuntos Exteriores Fumio Kishida ha anunciado por su parte que Tokio tratará de lograr una nueva resolución del organismo internacional para condenar la prueba de Corea del Norte, y anuncio que se reunirá con la embajadora de Estados Unidos en Japón, Caroline Kennedy, para tratar el asunto.
Los medios locales apuntan además que el Gobierno nipón podría estar considerando endurecer sus sanciones a Pyongyang tras el ensayo nuclear, el cuarto después de las tres pruebas de 2006, 2009 y 2013.
Tokio alivió algunas de las sanciones unilaterales impuestas al país vecino en julio de 2014 como recompensa por los progresos logrados en aquel entonces en su investigación conjunta sobre los secuestros de ciudadanos japoneses desde la década de 1970.