La Audiencia de Málaga ha confirmado la prisión provisional del guardia civil investigado en el accidente mortal ocurrido a finales de junio en la A-7, a la altura de Torremolinos (Málaga). Así, rechaza el recurso de apelación presentado por la defensa en contra del auto del juzgado en que se acordó mantenerlo en la cárcel.
El siniestro tuvo lugar el día 28 de junio y fallecieron un hombre y una mujer de Bahrein y otra mujer de Kuwait; mientras otras tres personas, también del primer país, resultaron heridas. Familiares de las víctimas, a través de cuatro letrados, entre ellos Manuel Temboury, se han personado en la causa.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Torremolinos acordó en su momento el ingreso en prisión del investigado por los delitos de homicidio imprudente, lesiones y contra la seguridad vial. El detenido dio positivo en las pruebas de alcohol y drogas que se le realizaron.
Ahora, la Sección Primera de la Audiencia estima, según un auto al que ha tenido acceso Europa Press, que existen "indicios racionales de criminalidad", ya que, según un informe pericial, el investigado presuntamente había consumido bebidas alcohólicas y cocaína; además del "exceso de velocidad con que conducía supuestamente".
Así, la Sala de apelación se refiere al riesgo de fuga existente, apuntando que tras el accidente, el hombre presuntamente intentó huir del lugar de los hechos, lo que se une a "la naturaleza y gravedad de los delitos imputados" y a la "gravedad de las penas que pudieran imponérsele".
En este sentido, considera que hay "un riesgo real y grave de evasión", pese a que el investigado tenga arraigo en España; así como de "reiteración delictiva, dada la grave adicción a sustancias estupefacientes reconocida, con el consiguiente grave riesgo para la circulación y sobre todo para otros conductores y viandantes".
Al respecto, se expone que, según los informes, en las pruebas realizadas dio un resultado de 0,47 y 0,50 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, cifras superiores a los límites administrativos permitidos; pero sobre todo "dio positivo en consumo de drogas, concretamente cocaína".
Así, indica que "si los hechos denotan gravedad y un desprecio hacia la vida de los demás usuarios de la vía, el mayor desvalor parte de la condición de agente de la Guardia Civil del investigado, así como que, una vez producida la colisión, tuvo que ser frenado por policías pues salió huyendo, en lugar de llamar a emergencias".
Para el Tribunal de apelación, los argumentos tenidos en cuenta por el instructor a la hora de acordar la prisión "son demoledores" y, además, señala que "no es desproporcionado el periodo de preventiva sufrido", por lo que desestima el recurso y mantiene lo acordado por el juzgado.