Fueron sorprendidos en un control en Las pedrizas cuando intentaban realizar un transporte de droga desde España al extranjero en 2021
Tres narcotraficantes han sido condenados con penas de hasta 13 años por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Málaga por intentar matar a unos policías nacionales durante una persecución, tras ser sorprendidos cuando intentaban realizar un transporte de droga desde España al extranjero en 2021.
Uno de los procesados ha sido condenado a una pena total de trece años y cuatro meses de prisión por los delitos de homicidio en grado de tentativa, atentado con vehículo a motor contra agentes de la autoridad, contra la salud pública, integración de grupo criminal y falsedad en documento oficial, según la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE.
Otros dos implicados ha sido condenados cada uno de ellos a dos años de cárcel por delitos contra la salud pública, integración de grupo criminal y falsedad en documento oficial.
En los hechos probados se señala que los tres acusados, en compañía de otras personas que no han podido ser juzgadas al estar en rebeldía, conformaban un grupo criminal dedicado al comercio ilícito de sustancias estupefacientes.
Durante las pesquisas, los agentes comprobaron que en octubre de 2021 iban a realizar un transporte de droga desde España hasta el extranjero y para ello dos de los acusados salieron desde su domicilio ubicado en Marbella, unos iban como lanzadera para evitar posibles controles y otros conducían con la droga.
Al llegar a la altura del control de peaje ubicado en las Pedrizas, en Málaga, la Policía los intentó identificar pero huyeron tras impactar contra la barrera de peaje y sin hacer caso a las señales acústicas y luminosas de los agentes.
La persecución por la autovía A-45 en sentido Córdoba duró unos 25 minutos y durante el trayecto el vehículo que los acompañaba intentó obstaculizar la marcha de los coches policiales y, en un momento dado, arremetieron directamente contra ellos a una velocidad cercana a los 160 kilómetros horas y los policías sufrieron heridas de diversa consideración.
La operación policial se cerró dos meses más tarde con la detención de tres de los narcotraficantes y la intervención de 1.286 kilos de THC (resina de cannabis) y más de 12.00 euros en efectivo procedentes del tráfico ilícito de estupefacientes.